El Pentágono exigió el viernes a Rusia que retire “inmediatamente” el convoy supuestamente humanitario que entró al bastión prorruso de Lugansk, en el este de Ucrania, y advirtió de nuevas sanciones estadounidenses.
El envío de camiones “constituye una violación de la soberanía e integridad territorial de Ucrania por parte de Rusia”, declaró a periodistas el portavoz del Pentágono, el contralmirante John Kirby.
“Rusia debe retirar inmediatemente sus vehículos y su personal del territorio de Ucrania. De no hacerlo, sufrirá costos y aislamiento adicionales”, dijo Kirby.
El militar dijo que no estaba claro si realmente el convoy estaba realizando una misión humanitaria o si estaba apoyando a los separatistas pro-rusos.
“Rusia no debe enviar vehículos, personas o carga de cualquier tipo a Ucrania, ya sea con el pretexto de (que se trata de) convoyes humanitarios o cualquier otro, sin el permiso expreso de Kiev”, subrayó.
Hasta ahora no estaba claro qué tipo de carga estaba siendo transportada hasta el este de Ucrania.
“No tenemos una idea clara de lo que hay en esos camiones”, dijo Kirby.
Los funcionarios locales en Ucrania dijeron que 20 camiones en total llegaron al bastión rebelde prorruso de Lugansk este viernes, a pesar de las objeciones planteadas por Kiev, y las potencias occidentales, que pedían una supervisión expresa de la Cruz Roja.
Este viernes el Consejo de Seguridad de la ONU se reunía de urgencia por el tema, mientras la UE y la Unión Europea condenaron el ingreso del convoy, considerándolo una violación de las fronteras de Ucrania. AFP