Un sismo de 5,7 grados en la escala de Richter sacudió esta mañana el este del Peloponeso y parte de las islas Cícladas, sin que haya informaciones sobre daños.
Los temblores se pudieron sentir desde Atenas hasta Kalamata, en el sur del Peloponeso, e incluso en la isla de Creta.
El epicentro se situó en el mar, a una profundidad focal de unos 85 kilómetros, entre la región de Laconía en el Peloponeso y la isla de Milos, en las Cícladas.
El terremoto se produjo a las 06.45 hora local (03.45 GMT) y tres minutos más tarde se registró una réplica en el mismo lugar, que alcanzó los 4,7 grados en la escala de Richter.
En declaraciones a la cadena de televisión privada Mega, el catedrático de Geología Efthimios Lekkas señaló que la magnitud del terremoto es habitual para esa región.
Por su parte, el director del Instituto de Investigación Geodinámica, Gerasimos Papadópulos, indicó que no se espera que las réplicas vayan a ser particularmente fuertes, por encontrarse el epicentro en un entorno submarino.
La actividad sísmica en Grecia es intensa y pequeños y medianos temblores están a la orden del día.
En febrero pasado, sin embargo, un fuerte terremoto de 6,1 grados sacudió la isla de Cefalonia, en el mar Jónico, que causó numerosos daños materiales.
Esta misma semana, la Comisión Europea aprobó el desembolso de 3,7 millones de euros del Fondo de Solidaridad para ayudar a cubrir los gastos derivados de este terremoto. EFE