Habitantes de San Bernardino en conjunto con integrantes del Frente en Defensa del Norte de Caracas denunciaron una nueva invasión en la zona, en la cual 50 personas ingresaron por la fuerza a un edificio en construcción ubicado en la avenida Los Próceres. Informaron que ya van 11 las edificación invadidas en la parroquia y más de 130 en el norte de la capital, convirtiéndose en focos de inseguridad y violencia.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, explicó que hace unos días un grupo de 50 tomistas ingresaron a la edificación a medio construir y entraron por la fuerza impidiendo la entrada del propietario, causando temor y zozobra a la comunidad que ve en riesgo el derecho a la propiedad privada. “Las invasiones son centro de hechos delincuenciales como atracos, robos, tráfico de drogas y hasta secuestro, como lo demuestran las 11 edificaciones tomadas en San Bernardino, donde en sus alrededores han aumentados las cifras de inseguridad”, afirmó.
Rojas señaló que esta es la cuarta invasión en menos de un mes en el norte de la capital, dos de la cuales fueron impedidas gracias a la presión popular y denuncia inmediata de la comunidad. “En la actualidad más de 130 edificaciones se encuentran tomadas en esta zona de Caracas, específicamente 37 en El Recreo, 29 Candelaria, 11 San Bernardino, 30 en Altagracia y 20 en San José, casi que podemos decir que tenemos un record guinees en violaciones a la propiedad privada”.
El luchador social exigió al gobierno nacional y municipal que asuma sus responsabilidades y no sigan con un silencio cómplice, la comunidad clama el desalojo de estas estructuras para así respetar el derecho a la propiedad y seguridad. “Jorge Rodríguez, Ernesto Villegas y Miguel Rodríguez Torres son culpables por omisión ya que ignoran esta realidad a pesar de tenerla en sus narices, hace poco debatimos con uno de ellos y en su cara le expresamos que se debe respetar el derecho a la propiedad. Exhortamos a que se despliegue dispositivos de seguridad especiales alrededor de estas edificaciones”, dijo.
Reveló que la Asamblea Nacional debe discutir el problema de violación a la propiedad en vez de centrarse en pura politiquería, las invasiones son un azote en Caracas y es vital que se haga contraloría a funcionarios gubernamentales y cuerpos de seguridad que participan en estos hechos delictivos. “En las estructuras tomadas están involucradas mafias que extorsionan a dueños y hasta personas que no tienen donde vivir, hay pruebas que muchos líderes de las invasiones trabajan para organismo del estado y hasta son guardias o policías”.
Concluyó señalando que el asesinato del diputado Robert Serra en la parroquia La Pastora es un reflejo de los altos niveles de inseguridad que los caraqueños llevan años denunciando en el norte de la ciudad, siendo uno de los epicentros las invasiones. “No hay muertos rojos ni azules sino venezolanos víctimas de la violencia, clamamos no más impunidad”, aseguró.
“Exigió que me devuelvan mi propiedad por la que trabaje toda una vida”
Por su parte Gumersindo Rodríguez, propietario del edificio, pidió a la Guardia del Pueblo desalojar lo antes posible el inmueble para poder poner en marcha un proyecto urbanístico que generaría empleo, asimismo recalcó que a lo interno de la estructura los tomistas la usan como guarida para cometer delitos como la distribución de drogas. “Soy dueño de esta propiedad desde hace 24 años y mi deseo es producir por Venezuela, todo el trabajo de una vida está invertido en este edificio”, sentenció.
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