La joven ecuatoriana fallecida hoy a causa de la gravedad de las heridas sufridas al ser embestida por un vehículo conducido por un palestino el miércoles 22 en Jerusalén será enterrada hoy en esta ciudad por expreso deseo de la familia.
Así lo informó a Efe la jefa adjunta de la embajada del Ecuador en Tel Aviv, Leticia Baquerizo, quien precisó que el sepelio tendrá lugar en una institución fúnebre conocida como “Shangar Funeral House”, antes de que los restos de la joven sean enterrados en el cementerio del Monte de los Olivos de Jerusalén.
Karem Jemima Mosquera Barrera, de 22 años y natural de Guayaquil, se debatía entre la vida y la muerte desde el pasado miércoles tras ser arrollada por el vehículo, en lo que, según la principal línea de investigación que desarrolla la Policía israelí, se trató de un acto premeditado.
Su madre y hermana se desplazaron al país y se encuentran en Jerusalén donde tomarán parte en el funeral, al que acude asimismo una delegación de la Embajada ecuatoriana en Israel, con el embajador Guillermo Bassante al frente.
El representante diplomático pronunciará unas palabras en el sepelio en las que “lamentará lo ocurrido, se solidarizará con los afectados y agradecerá al Estado de Israel”, adelantó Baquerizo.
El mismo suceso acabó con la vida de una bebé judía de tres meses y dejó otros seis heridos.
Mosquera se encontraba en Israel preparándose para hacer la conversión al judaísmo desde hace un año.
La joven pasó los últimos dos meses en una Midrashá, un instituto de estudios talmúdicos para mujeres, junto a otras congéneres suramericanas.
El conductor del vehículo, de unos veinte años e identificado como Abdel Rahman a-Shaludi, residente de Silwan, Jerusalén Este, tenía antecedentes penales relacionados con violaciones de la seguridad y fue abatido por los disparos de un agente del orden cuando aparentemente trataba de escapar del lugar de los hechos.
El funeral del supuesto atacante estaba previsto esta noche en la ciudad vieja de Jerusalén, sin que se conozca si finalmente tendrá lugar ante la reticencia de sus familiares, que consideraron lo ocurrido un accidente, a que sea un acto limitado por razones de seguridad a una veintena de personas.
EFE