Asambleas de Ciudadanos emiten la “Proclamacion de Barcelona”

Asambleas de Ciudadanos emiten la “Proclamacion de Barcelona”

En Barcelona, los delegados electos en Asambleas de Ciudadanos en los estados Anzoátegui, Bolívar, Monagas, Sucre, Nueva Esparta y Delta Amacuro, reunidos en el Congreso de Oriente expresamos nuestra irrevocable decisión de lograr el restablecimiento pleno de la democracia y la libertad en Venezuela, así como la de unir nuestros esfuerzos para la exigente y hermosa tarea de la reconstrucción nacional.

El Congreso de Oriente es expresión legítima del pueblo angustiado, asediado y colmado de limitaciones y necesidades, y se asume como parte del poder constituyente ciudadano para buscar una salida urgente a la crisis que vive Venezuela.





En nuestra región impera la incapacidad, la improvisación, la mediocridad de la clase dirigente oficial, su falta de visión e irresponsabilidad. Sus políticas, como en todo el país, han producido hambre, miseria, pobreza, antivalores, vacío de la autoridad política y administrativa, oscurantismo en el debate, opacidad en el manejo de las cuentas públicas, corrupción desenfrenada e impunidad frente al delito. Así se ha creado una geografía de horror que sólo la miopía del régimen y sus representantes impide ver en su aterradora dimensión.

Oriente padece hambre y desempleo. Miles de trabajadores parados por falta de ofertas de trabajo. Tragedia de la educación por la deserción escolar y la inexistencia de profesores en materias esenciales. Nuestros pueblos y caseríos han sido abandonados. El servicio de salud es miserable y los médicos y medicinas no se pueden conseguir. No hay alimentos, la producción campesina se ha reducido a una insignificante cosecha; es estrepitosa la caída de la ganadería de carne y leche. Las empresas pequeñas y medianas mueren de mengua. La clase media desaparece y los pobres ya no pueden aspirar al ascenso social. El Oriente vive en toque de queda a manos de la policía, el hampa, el narcotráfico y el gobierno. Estamos presos en nuestros hogares mientras en las calle impera el caos.

Ante esta anarquía y ante la ausencia de un liderazgo competente, hemos decidido asumir directamente, nosotros, delegados al Congreso Ciudadano reunidos en Oriente, la responsabilidad de liderar la conducción del rescate de la libertad y la reconstrucción nacional. Hemos esperado mucho de los dirigentes, ahora les exigimos que se incorporen con nosotros para derrotar la dictadura imperante y lograr el cambio del régimen lo antes posible. Lo haremos por métodos constitucionales y pacíficos, pero no renunciaremos a ese objetivo en procura de atajos que sólo signifiquen pequeñas parcelas de falso poder para cohabitar con el régimen.

Las viejas recetas de acción política han sido superadas por las nuevas realidades, la política regional está invadida de liderazgos débiles. Ahora es necesario reconstituir la dirección democrática con la directa participación de los ciudadanos, sean independientes o militantes de partidos políticos.

El Congreso de Oriente es un llamado a la organización de los ciudadanos de abajo hacia arriba. Sólo así seremos aptos para exigir en la calle nuestros derechos. Sólo así podemos acercar el objetivo de cambio profundo que tantas veces se nos ha escapado. Viene una crisis monumental en los próximos meses y sólo la organización ciudadana sólida podrá manejarla.

Vendrán también elecciones en las que los ciudadanos participaremos en el contexto de la lucha por el reemplazo del régimen. Como demócratas entendemos que las elecciones son un mecanismo esencial de la democracia, pero hoy sólo tienen sentido si se asumen en el marco de la denuncia vigorosa del ventajismo, el fraude, la coacción y la militarización de los procesos electorales. Las elecciones son para que la sociedad se exprese y no para permitir la confiscación de su representación. Proclamamos que los líderes o voceros democráticos, deben nacer y validar su liderazgo, renovar sus lealtades en la entraña del pueblo en elecciones primarias y abiertas sin privilegios que sólo premian lealtades personales o grupales.

El Congreso de Oriente, como primer congreso regional, llama a los delegados de todo el país a asumir plena conciencia de nuestra misión. Los ciudadanos tenemos la tarea de derrotar este régimen y de conquistar la libertad. Somos herederos de las luchas heroicas de estudiantes y trabajadores petroleros, de obreros de todo el país y de empresarios que se han jugado por la democracia, de los periodistas y editores que han luchado sin doblegarse, de las mujeres que como madres, esposas e hijas han luchado sin desmayo. Somos herederos de los que han caído asesinados, de los presos políticos y exiliados. Somos herederos de la Generación de 2014 que abrió el camino para la salida de este régimen opresor.

Ahora a organizarnos y a organizar, a difundir nuestro mensaje, a ganar voluntades, a solidarizarnos con todo el que luche, a tenderle la mano a los que discrepan, a buscar coincidencias incluso con quienes hemos adversado, a construir la unidad de las trincheras, de los luchadores.

Los ciudadanos hemos escrito la historia contemporánea y nos toca escribir el penúltimo capítulo: el del cambio constitucional del régimen actual. El último capítulo de este tiempo será el de la reconstrucción nacional. A ella convocamos.

Nota de Prensa