Un padre haría cualquier cosa por sus hijos, incluso volverse súper héroe.
Hace unos meses, Jayden Wilson, un niño británico de entonces 4 años, se dio un golpe en la cabeza y fue llevado al hospital para descartar alguna lesión. Tras unos exámenes los neurólogos le informaron a los papás que habían encontrado “algo” en el cerebro del pequeño, por lo que debían hacerle una biopsia para esclarecer el panorama.
Con los resultados el futuro se les nubló de repente pues a Jayden se le detectó cáncer terminal de cerebro. El diagnóstico del tumor grado 4 en el cerebro de Jayden fue devastador pues nunca presentó señales ni síntomas de su padecimiento.
Su esperanza de vida es de un año, por lo que sus padres se esfuerzan por hacer de cada uno de sus días algo inolvidable. Por ello, el día de su cumpleaños número cinco recibió una gran sorpresa: La visita del mismísimo Spiderman, quien apareció dando un espectacular salto ante los ojos de Jayden, quien no daba crédito de lo que veía.
En realidad, debajo del traje de Spiderman se encontraba Mike Wilson, quien hizo todo lo posible para que su hijo tuviera el mejor de los regalos. Y lo logró.
Fuente: Sopitas