Hoy, el diputado a la Asamblea Nacional José Avila (PSUV, Carabobo), afirmó en un programa de VTV que la empresa Polar “le daba por entrar en paradas no programadas de la producción” y continuó “y qué es lo que ello buscan… ajuste de los precios” remató.
Asombra la crítica del diputado oficialista a la que según él es una práctica inapropiada de una empresa venezolana, porque lo que denuncia Ávila es lo que Nicolás Maduro define como una práctica de altísmo interés nacional.
Hace dos días Maduro afirmó ““Hemos coordinado para una reunión especial de países Opep y no Opep muy pronto, para tomar decisiones en defensa del petróleo y de los precios del petróleo; y del mercado petrolero mundial”. Respecto a las palabras de Maduro, el canciller Rafael Ramírez da por hecho que la Opep recortará la oferta para ayudar a contener la caída de los precios, por lo que, en su opinión, la intriga en la capital austríaca radicará únicamente en el porcentaje de reducción.
Otro ejemplo de ese discurso contradictorio, doble moralista, que se ha agotado con el paso del tiempo. El mundo busca un mejor precio, un “precio justo” del petróleo, pero Maduro busca que la OPEP lo impida. Exactamente lo que el diputado Avila, sin prueba alguna, criticó de Polar (lapatilla.com)