El Estado colombiano asumirá la custodia de la niña de 11 años que permanece ingresada en un hospital de Cali (suroeste) tras haber ingerido 104 cápsulas de cocaína para transportarlas como “correo humano”, aseguró hoy el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
“Si la niña evoluciona bien, será dada de alta en 10 días. Posteriormente, quedará a disposición del ICBF para asumir su custodia y protección mientras se adelantan investigaciones”, explicó a Caracol Radio el director regional del ICBF en el departamento del Valle del Cauca, de donde es capital Cali, Jhon Arley Murillo.
Murillo indicó además que la menor se encuentra en cuidados intensivos, entubada e inconsciente, debido a que una de las cápsulas estalló en su estómago.
“Una de las cápsulas sí se rompió en el interior y por ello la niña presentaba un estado delirante como consecuencia del influjo de esta sustancia en su organismo”, agregó.
Según el funcionario, “gracias al laxante que se le brindó en el centro médico, la niña logra expulsar unas pocas cápsulas, pero tuvo que ser intervenida quirúrgicamente para retirarle las restantes”.
Actualmente están bajo investigación los padres de la niña, pues según la Policía de Cali diferentes versiones apuntan a que el padre la había llevado de paseo el lunes y la retornó en horas de la tarde, un espacio de tiempo en el que podría haber ingerido las cápsulas, del tamaño de un chicle.
Fue esa misma noche cuando la madre trasladó a la menor a urgencias después de que empezara a encontrarse mal.
Según Murillo, la madre explicó que la niña “ya había salido del país con su padre en marzo pasado” y que estuvo un par de meses en España.
Además, tenía previsto otro viaje al extranjero en los próximos días, presumiblemente también para España, añadió el funcionario. EFE