El Senado chileno aprobó este miércoles, al final de una maratónica sesión, el fin del sistema electoral binominal heredado de la dictadura de Augusto Pinochet, que permitía una sobrerrepresentación de la derecha chilena, reseña AFP.
Después de 21 horas de debate, la Cámara Alta chilena aprobó la mañana de este miércoles por 24 votos a favor, tres en contra y siete abstenciones, el fin del sistema electoral binominal para instaurar uno de carácter proporcional.
“Esto permite terminar con un sistema electoral único en el mundo”, celebró el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo.
“Nos sentimos tremendamente orgullosos de decir que hemos logrado algo histórico”, agregó por su parte la presidenta del Senado, Isabel Allende.
La aprobación se logró después de múltiples intentos fallidos por reformar el sistema instaurado por la dictadura de Augusto Pinochet en 1980, y que ha permitido una histórica sobrerrepresentación en el Congreso de la derecha y la exclusión de las minorías políticas, como los partidos comunista y humanista.
El sistema, único en el mundo, dividía el país en distritos electorales donde se elegían dos representantes inscritos en listas electorales. Para que los dos candidatos de una lista fueran elegidos, debían doblar a la otra en cantidad de votantes.
Si no conseguían doblar la votación, resultaba electo un candidato de cada lista. Así muchas veces fueron elegidos parlamentarios que habían obtenido el tercer lugar en número de votos.