El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, cerró hoy su visita de tres días a El Salvador degustando una “pupusa loca”, una especialidad del platillo típico local, que fue preparada especialmente para él.
De camino al aeropuerto, Ban; su esposa, Yoo Soon-taek; y su comitiva pararon en “El Pupusódromo”, un popular sector de restaurantes de pupusas, en la localidad de Olocuilta, 22 kilómetros al sur de San Salvador.
La pupusa, considerada como el platillo nacional de El Salvador, es una tortilla asada de masa de arroz o maíz, rellena de queso, frijoles, chicharrón u otros productos.
La joven cocinera Nancy Rodríguez, de la pupusería “Brenda”, hizo para Ban una “pupusa loca”, llamada así por la diversidad y cantidad de sus rellenos, unos 10, como queso, fríjoles, chicharrón, pollo, camarón y varias hierbas locales, explicó ella a Efe.
Ban y su esposa presenciaron la elaboración de la pupusa, que pocos minutos después degustaron y compartieron con algunos de sus acompañantes, aunque varios de ellos compraron las suyas aparte.
El secretario general solo tomó agua para acompañar su “pupusa loca” y al final pagó de su bolsillo toda la cuenta, que sumó 11,75 dólares, pero con una propina tan generosa que llegó a los 30 dólares, dijo a Efe la propietaria del restaurante, Yacira Aguilar.
Una “pupusa loca” puede costar entre dos y seis dólares, de acuerdo con su tamaño y rellenos; la elaborada para Ban, similar a una pizza personal, fue de cinco dólares.
Aguilar relató que su restaurante fue escogido por un miembro salvadoreño de la escolta de Ban que llegó al lugar como avanzada, a quien no conocía, y que le dijo que debía atender a alguien importante “que quería ver” la elaboración de las pupusas.
“No sabíamos en realidad quién era, solo que era alguien importante”, y apenas media hora antes de su llegada le dijeron que era el secretario general de Naciones Unidas, agregó Aguilar.
Pero resultó que Ban no se conformó con “ver” la elaboración de la pupusa y al final se la comió, y aunque “se la íbamos a obsequiar”, él insistió en pagar la cuenta, dijo.
Saboreado el platillo típico salvadoreño, y tras pronunciar correctamente la palabra “pupusa” ante los periodistas, Ban Ki-moon continuó su desplazamiento hacia el aeropuerto internacional “Monseñor Oscar Arnulfo Romero”, 44 kilómetros al sur de San Salvador.
Ban llegó el jueves a El Salvador para asistir el viernes a la conmemoración del XXIII aniversario de los Acuerdos de Paz que, con la mediación de Naciones Unidas, acabaron con la guerra civil salvadoreña (1980-1992).
Entre el viernes y hoy el secretario general de la ONU se reunió con el presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, con otras autoridades y sectores sociales, y visitó la Asamblea Legislativa, la Corte Suprema de Justicia y la tumba de monseñor Romero, quien fue asesinado en 1980. EFE