El ex juez de Venezuela Benny Palmeri Bacchi fue condenado el lunes a más de seis años de prisión en un caso de narcotráfico que involucró a funcionarios de alto rango del gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez con un cartel colombiano de la droga.
En una breve audiencia realizada en los tribunales federales de Miami la jueza Ursula Ungaro sentenció a Palmeri a 80 meses de prisión por los cargos de asociación ilícita para obstruir la justicia, lavado de dinero y extorsión.
El ex juez, quien fue detenido en el Aeropuerto Internacional de Miami en julio de 2014 cuando llegaba con su familia para pasar unas vacaciones en Disney World, se declaró culpable de esas acusaciones en noviembre, como parte de un acuerdo que selló con la fiscalía federal.
Vestido con traje de presidiario de camisola y pantalón beige, Palmeri escuchó la sentencia sentado junto a sus abogados. Permaneció serio, con auriculares en sus oídos para entender la traducción al español de la audiencia que se realizaba en inglés.
La máxima condena que enfrentaba era a 20 años de cárcel, pero la jueza dijo que debido al acuerdo que había sellado con la fiscalía optaba por una sentencia más leve.
Explicó, no obstante, que debido a la gravedad de las acusaciones no podía darle la condena más leve, equivalente a 70 meses de prisión.
Un jurado investigador acusó a Palmeri de confabularse con el ex director de la Interpol en Venezuela, Rodolfo McTurk, para ayudar a traficar cocaína colombiana a través de Venezuela a Estados Unidos.
McTurk también fue acusado, pero está en Venezuela.
Según documentos del expediente, Palmeri recibió 850.000 dólares para ayudar a acusar falsamente en Venezuela a Jaime Alberto “Beto” Marín Zamora, uno de los líderes del cartel colombiano del Norte del Valle.
El plan consistía en usar ese caso falso para evitar que Marín fuera extraditado a Estados Unidos.
Pero el colombiano enfrentó a la justicia estadounidense y cumple una sentencia de 16 años de prisión tras declararse culpable de cargos de narcotráfico. AP