Durante enero de 2015 hubo un aumento del 32% en el número de manifestaciones públicas registradas en Venezuela. En el primer mes del año se contabilizaron 112 protestas, 19 de ellas en el estado Miranda y 18 en Lara. El registro de los primeros 31 días del año arrojó como resultado que las formas de protestas más comunes fueron el cierre de vía (50), considerado un método de confrontación pero no violento.
En segundo lugar se encuentran las concentraciones (28), bien sea en plazas o en las afueras de las sedes de los poderes públicos, donde los manifestantes alzan su voz de protesta frente a quienes tienen la capacidad de garantizar los derechos exigidos. Los ciudadanos también usaron como forma de protesta las marchas, los pancartazos, el encadenamiento, los paros, las protestas simbólicas, las cadenas humanas, las caravanas, las huelgas de hambre y los pupitrazos.
Protagonistas
La mayor cantidad de manifestaciones fueron realizadas por los Vecinos (37) que denuncian fallas en los servicios básicos, inseguridad y mala vialidad; es decir, problemas que afectan a comunidades: desde urbanizaciones hasta caseríos. La categoría Actores Heterogéneos realizó 15 manifestaciones, estas vendrían siendo aglomeraciones de personas que no viven en la misma comunidad pero se unen para protestar por situaciones que afectan a la colectividad en general. En tercer lugar se encuentra Estudiantes (12), seguido de Trabajadores (9) y Encapuchados (8). Estos últimos en estatus de anonimato típicamente estarían relacionados con las protestas violentas, sin embargo 5 de las 8 protestas protagonizadas por encapuchados fueron de carácter pacífico.
Por otra parte, la mayoría de las manifestaciones reprimidas fueron de carácter pacífico, lo que evidencia un uso desproporcionado de la fuerza por parte de los órganos de seguridad, así como de falta de garantías por parte del Estado, para que los ciudadanos ejerzan libremente su derecho constitucional a la protesta pacífica. El total de manifestaciones violentas corresponde un 3,6% del total, por lo que en general se podría asegurar que los ciudadanos prefieren realizar sus reclamos generando impacto, llenando las calles de personas o colapsando avenidas, pero sin llegar a la confrontación física con sus conciudadanos.
Hasta la fecha el monitoreo diario arroja un saldo de 16 protestas reprimidas, así como 38 personas detenidas y otras 36 lesionadas. La Policía Nacional Bolivariana, fue el organismo que reprimió la mayor cantidad de protestas (6), mientras que la Guardia Nacional Bolivariana, lo hizo con 4 manifestaciones.
Al comparar estos resultados con su equivalente del 2014, se evidencia que durante el primer mes del año la cantidad de protestas realizadas ha aumentado un 32% y especialmente las manifestaciones violentas presentan un incremento del 33% con respecto al año anterior. Más preocupante aún son los porcentajes de crecimiento de la represión, ya que en enero del 2014, no se contabilizaron protestas reprimidas, (ni siquiera las de carácter violento). Lo mismo ocurre con los detenidos y lesionados. Esto evidencia la deficiencia de los organismos de seguridad ciudadana a la hora de su desempeño en el uso la fuerza para controlar el orden público.
Los motivos de la protesta
Como ha sido la tendencia de los años anteriores, los motivos que llevan a las personas a manifestar son diversos, sin embargo hasta la fecha podríamos evidenciar cinco causas principales, siendo la primera la que se refiere a la seguridad ciudadana y a la necesidad que tienen las personas de obtener soluciones reales, ante el flagelo de la inseguridad. Durante enero ocurrieron 19 manifestaciones relacionadas a la demanda de seguridad ciudadana, estas se dieron luego de robos, o de asesinatos de miembros de las comunidades.
Las fallas de los servicios básicos se ubicaron como la segunda causa de manifestaciones (16) y específicamente los constantes racionamientos de agua, o en algunos casos, la ausencia total de este servicio sirvió de motivación de acciones de calle (75% de las manifestaciones por los servicios básicos tuvieron que ver con el agua potable).
La falla generalizada de los servicios básicos ocupó el segundo lugar (es decir, cuando existía más de un servicio del cual carecían los ciudadanos), con 13%, mientras que la electricidad y el gas doméstico ocuparon el tercer y cuarto lugar con 6% respectivamente.
El acceso regular a productos básicos, o simplemente el fin del desabastecimiento, fue la tercera demanda en las manifestaciones en enero. Aun cuando este fue un problema evidente durante el 2014, a principios del año 2015 proliferaron largas colas de consumidores para abastecerse de los bienes básicos como leche, pollo, café y artículos de higiene personal que se venden a precios regulados. Por su parte la categoría contra la crisis del país (quinto puesto) evidencia que es un tema que sigue generando malestar en la ciudadanía, sin embargo en el 2014 se ubicaba como primer lugar en las causas de las protestas.
La cuarta causa de manifestación fue dada por aquellos ciudadanos que exigían sus derechos laborales, bien sea quienes reclamaban aumento salarial, denunciaban malos tratos, o quienes pedían la discusión del contrato colectivo. Los derechos laborales generalmente se encuentran como la principal causa de manifestaciones sociales, y es tan solo a partir del año 2014 cuando otra serie de problemáticas como la crisis económica del país se ubicó al frente de las necesidades de los ciudadanos.
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