El juez venezolano Alí Paredes fue detenido por “presunto favorecimiento de procesados” en el caso del empresario Walid Makled, conocido por sus actividades irregulares y sus acusaciones contra funcionarios de Venezuela, que la semana pasada fue sentenciado a 14 años de prisión por narcotráfico.
“El Ministerio Público (MP) logró privativa de libertad para el juez (…) Alí Fabricio Paredes, por presunto favorecimiento de procesados en el caso Makled”, dice un comunicado de la Fiscalía difundido hoy que indica que el letrado permanecerá en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
El escrito del MP señala que el magistrado fue imputado por la presunta comisión de los delitos “favorecimiento a procesado y asociación para delinquir” previstos en la Ley Orgánica de Drogas y la Ley Orgánica Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, respectivamente.
Asimismo, la Fiscalía informó que el tribunal del caso contra Paredes “acordó la prohibición al juez de movilizar cuentas bancarias, enajenar y gravar bienes”.
Paredes ya era un magistrado conocido por la opinión pública venezolana e internacional por ser quien llevaba el caso de la jueza María de Lourdes Afiuni, presa durante más de cuatro años, acusada por la supuesta liberación irregular de un empresario en 2009.
La magistrada fue detenida después de que el entonces gobernante venezolano Hugo Chávez (1999-2013) pidiera públicamente su apresamiento por la liberación del empresario.
El equipo de abogados de Afiuni alegó, a lo largo de su proceso judicial, que Paredes atendía a los requerimientos del Gobierno y que no era imparcial.
El pasado martes el MP informó en un comunicado que la fiscal general, Luisa Ortega, apelaría la sentencia de 14 años de prisión para Makled, pues el empresario quedó absuelto de otros delitos que le inculparon, como ocultamiento de arma de fuego, asociación para delinquir y sicariato.
Asimismo, se informó que los hermanos de Makled, Abdalá, Basel y Alex, fueron sentenciados a condenas de entre seis y ocho años de prisión por ocultamiento de armas de fuego y legitimación de capitales.
Makled fue entregado a las autoridades venezolanas por Colombia a mediados de 2011 y once meses después se dio inicio al juicio en su contra en medio de una gran expectación por supuestas informaciones que manejaba sobre el Gobierno de entonces.
Detenido el 19 de agosto de 2010 en la ciudad colombiana de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, Makled definió a Venezuela en distintas entrevistas concedidas desde la cárcel colombiana como un “narcoestado”.
Aseguró entonces que hizo pagos de grandes cantidades de dinero a funcionarios, incluido “el alto Gobierno”, y que había trabajado de manera muy cercana con generales venezolanos, ministros, diputados y gobernadores, incluida gente próxima al entonces responsable de la Dirección de Inteligencia Militar, Hugo Carvajal. EFE