Muchas personas suelen preguntarme quién es mi líder, siempre ha sido Dios y después de él, solo sigo a mi conciencia. Desde la infancia, mi familia me enseñó que la conciencia debería ser nuestro principal juez. Mi padre siempre decía un refrán: “Mas me importa el pesar de mi conciencia que la opinión de todo el mundo” .En estos momentos reflexiono acerca de la absurda decisión de la MUD, cercenadora del derecho de miles de venezolanos que aspiraban medirse en un proceso de carácter público, para tratar de obtener la nominación camino a las elecciones parlamentarias de este año. Muchos amigos me aconsejan que debo pasar “agachado” frente a esta situación, porque macular a la oposición, así sea con guantes de seda, es hacerle un favor al gobierno. Les confieso que no soy de los que practican el viejo dicho venezolano que reza: “con tu familia, con la razón o sin ella”. Soy enemigo de las solidaridades automáticas que exoneran de culpa a quien goza de nuestros afectos, pero condenan a priori a quien piensa diferente.
No me sentiría cómodo reclamándole al gobierno la promulgación de la resolución 8610, como lo vengo haciendo, sin fijar posición ante la decisión autocrática y sectaria de la MUD, violadora en grado superlativo del ordenamiento jurídico venezolano. Guardar silencio ante hechos tan graves es contrario al espíritu libertario que genéticamente llevamos los nacidos en la patria de Bolívar. La “trompada” estatutaria que acaba de propinar la MUD, conculca el derecho de los miles de venezolanos que aspiraban, desde sus espacios naturales, servirle al país como protagonistas de primera fila. ¿Por qué debemos resignarnos a guardar silencio frente a los desmanes de quienes se dicen nuestros aliados y representantes? ¿Por qué hacerlo si estamos cumpliendo 16 años confrontando el carácter autocrático y sectario del gobierno? ¿Qué hacemos con los líderes regionales, locales, independientes, comunitarios, juveniles, femeninos, sindicales, agropecuarios, entre otros, que se han venido preparando desde hace tiempo y que consideraban que había llegado la hora de ocupar espacios relevantes en el estamento político venezolano?
Los que decidieron en nombre de todos los opositores que hay primarias aquí pero allá no, deberían preguntarse qué pensará la gente acerca de las primarias chucutas de la MUD. ¿Estarán satisfechos o se abstendrán porque su líder no puede aspirar? Deseo dejar claro que mi crítica no es contra la MUD como organización. Mi reclamo va dirigido al pequeño grupo de partidos suscriptores de una medida autocrática, que en mi criterio, cierra el camino que hemos venido modelando para la recuperación de la democracia en nuestro país. ¡Veremos cual será la respuesta de la Venezuela democrática!
*Coordinador Nacional de “Gente” Generación Independiente
@alvareznv