Miles de clientes del Banco Madrid, filial en España de Banca Privada d’Andorra (BPA), no pueden acceder a su dinero, ya sea en depósitos, fondos de inversión o sicavs, tras ser intervenidas ambas entidades por las autoridades de España y Andorra e investigadas por supuestas operaciones de blanqueo de capitales.
La Comisión Nacional española del Mercado de Valores (CNMV) decidió hoy suspender temporalmente los reembolsos de los fondos de inversión y Sicav (Sociedades de Inversión de Capital Variable) gestionados por la gestora de inversión colectiva de Banco Madrid.
El escándalo se desató hace una semana tras conocerse que Estados Unidos acusó al BPA de lavar dinero de clientes como el Cártel de Sinaloa; Gao Ping, el supuesto cabecilla de una trama china; Andrei Petrov, presunto miembro de la mafia rusa y la petrolera estatal venezolana PDVSA.
Además, cuatro ex altos cargos del gobierno de Hugo Chávez y dos empresarios venezolanos estarían presuntamente implicados en un caso de blanqueo de dinero en España, según publica hoy el diario español El Mundo, que cita un informe de la unidad de inteligencia financiera española (Sepblac).
La suspensión de reembolsos acordada hoy por la CNMV “se circunscribe a los fondos en cuya operativa participaba el citado banco”, y “se prolongará por el tiempo imprescindible para garantizar los derechos de los inversores en estos productos y su igualdad de trato”, según explicó la Comisión en un comunicado.
La CNMV indicó que tomó esta decisión después de que los nuevos administradores de Banco Madrid, designados por el Banco de España, hayan solicitado el concurso voluntario de acreedores de la entidad, debido al “fuerte deterioro sufrido en la situación económica-financiera de Banco Madrid en los últimos días”.
A pesar de que en el momento de su intervención, la semana pasada, por el Banco de España, el Banco Madrid no presentaba problemas de solvencia, el escándalo sobre las supuestas implicaciones en el blanqueo de capitales del crimen organizado provocó una retirada masiva de fondos.
La denuncia presentada el pasado viernes contra Banco Madrid por el Sepblac ante el fiscal por operaciones irregulares, unida a la detención en Andorra del antiguo consejero delegado de BPA y su filial española, Joan Pau Miquel, contribuyó a desatar el pánico entre los clientes.
Tanto es así que hoy los nuevos administradores de la entidad especializada en grandes patrimonios, designados por el Banco de España, han solicitado el concurso de acreedores voluntario tras constatar que la capacidad de la entidad para hacer frente al cumplimiento puntual de sus obligaciones se había deteriorado.
La solicitud de concurso, explicó el supervisor en una nota, permite asegurar “un igual trato de los depositantes de la entidad y del resto de sus acreedores”, pero evita disponer en este momento de esos fondos, una medida aún más grave que el límite de 2.500 euros semanales que se pueden retirar en la matriz, BPA.
Además, el concurso de Banco Madrid supondrá pérdidas para quienes tuvieran más de 100.000 euros ahorrados en la entidad, el máximo que cubre el Fondo de Garantía de Depósitos de España.
A cierre de noviembre de 2014, unos 15.000 clientes tenían más de 695,6 millones de euros depositados en Banco Madrid, pero está por ver qué cantidad atesora a día de hoy tras la espantada de sus clientes, que ahora esperan que un juez decida si la entidad tiene opciones de ser vendida al mejor postor o directamente debe ser liquidada.
Antes de eso habrá que decidir también si los fondos de inversión y sicavs gestionados por Banco Madrid y bloqueados hoy por la CNMV pueden ser traspasados a otra compañía, lo que garantizaría que sus partícipes no pierdan dinero.
Entre ellos se encuentran clientes tan conocidos como el exjugador del Real Madrid Roberto Carlos, cuya sicav contaba con un patrimonio de 2,8 millones a cierre de 2014, o el inversor de origen indio Ram Bhavnani, afincado en Tenerife, con 11,4 millones, según la CNMV.
El ministro español de Economía, Luis de Guindos, insistió hoy en que Banco Madrid no supone ningún riesgo para la banca española y que “no tiene absolutamente nada que ver con las intervenciones que desde el inicio de la crisis, por desgracia, tuvimos que realizar”. Se trata de un caso “muy específico y muy concreto” que afecta a una entidad pequeña, ha añadido.
EFE