Cuando el parque zoológico holandés Burguers envió un dron a sobrevolar el área de los chimpancés para tener una mejor idea de cómo viven sus 14 monos, la respuesta fue fulminante.
Cuando el intruso mecánico se acercó a Tushi, una hembra de 23 años, esperó en un árbol, apretó los dientes y con una rama de árbol lo derribó.
Bas Lukkenaar, portavoz del zoo, dijo el martes: “El dron fue pérdida total. Cuesta unos 2.000 euros (2.100 dólares). Pero no me sorprende para nada Tushi haya hecho eso. Es muy hábil con las manos”.
La cámara siguió grabando en tierra el domingo tras el golpe de Tushi, en que se ve a los monos yendo a inspeccionar el aparato. AP