El trabajo de asesoría que la Fundación Centro de Estudios Políticos y Sociales realizó para el Gobierno de Venezuela no se circunscribió al campo de la estrategia política y la comunicación, también se extendía a áreas como la puesta en escena de actos multitudinarios televisados con los que el régimen chavista escenificaba la preocupación del líder de la Revolución Bolivariana por el pueblo. Así se desprende de los documentos que el diputado de la oposición venezolana Julio Montoya, actualmente en Madrid, ha entregado a LA RAZÓN de España y que, asegurá, proceden de uno de los ordenadores de la Fundación CEPS.
por A. Rojo/ LA RAZÓN de España
Los documentos contienen instrucciones detalladas sobre la organización de decenas de actos protagonizados por Nicolás Maduro desde octubre a diciembre de 2014, es decir, cuando Podemos ya era una formación política asentada y cuando, a raíz de las primeras informaciones sobre el cobro por parte de Juan Carlos Monedero del Banco del ALBA, el partido empezaba a desmarcarse del chavismo. Es pertinente recordar que, aunque tanto CEPS como Podemos niegan cualquier relación orgánica entre ellos, lo cierto es que en un momento u otro Iglesias, Errejón, Monedero, Bescansa y Alegre (entre otros cargos) formaron parte de la Fundación y que, en diciembre de 2014, CEPS y el Banco de Venezuela firmaron contratos por valor de 60.000 euros apareciendo como firmante en los mismos el «representante legal» de la Fundación, Sergio Pascual, secretario de Organización de Podemos, según informó en su momento «ABC».
Los documentos elaborados por CEPS revelan un sutil conocimiento de las últimas técnicas de comunicación política: nada es dejado al azar. Se detallan la situación de las cámaras, la colocacion de la tribuna presidencial, los lugares que ocupará «el pueblo» (i.e. los seguidores de Maduro), el sector donde se colocarán los periodistas, la banda musical y hasta las banderas venezolanas y fotografías del difunto «Comandante Supremo Chávez» (téngase en cuenta que los documentos sólo comprenden actos celebrados entre octubre y diciembre de 2014, cuando el antecesor de Maduro ya había muerto). Este último detalle de la fotografía de Chávez tampoco es gratuito: se especifica que los retratos del «Comandante Supremo» deben colocarse detrás de Maduro y en el mismo ángulo en el que se sitúan las cámaras de televisión para subrayar el concepto de continudad en el liderazgo de la Revolución.
Uno de los actos diseñados por CEPS para mayor gloria del presidente Maduro fue el lanzamiento de la «Misión (término chavista para denominar las acciones sociales del régimen) Jóvenes de la Patria ‘‘Robert Serra’’», que tuvo lugar frente a la fachada del Palacio Presidencial de Miraflores en Caracas el 7 de octubre de 2014 (croquis del evento bajo estas líneas). Otro es la «Instalación de la negociación colectiva del contrato marco para la Administración Pública Nacional» donde los analistas de la Fundación CEPS aconsejan: «La puesta en escena de la actividad juega un rol fundamental (…) visualizando la apertura negociadora y la acción conciliadora y resolutiva del presidente que genera amplios consensos».
De especial importancia son dos entregas de viviendas que Maduro protagonizó en televisión. La primera de ellas tuvo lugar en Pedre, en el estado de Mirando el 6 de noviembre de 2014. La elección de este lugar tiene su explicación en el contexto de la política interna venezolana: Miranda es el Estado del que es gobernador Hernesto Capriles y es uno de los feudos tradicionales de la oposición a Chávez. Las «ideas fuerza» que CEPS aconseja a Maduro recuerdan por su retórica a las consignas propias de dictaduras marxistas como las de Corea del Norte y China. Juzgue el lector: «La Gran Misión Vivienda Venezuela va más allá de satisfacer una necesidad: articula la Suprema Felicidad transversalmente a partir de la vivienda (nuevo territorio para la Suprema Felicidad y la irreversibilidad socialista, comunitaria y solidaria)».
Los actos a los que CEPS aplicó sus conocimientos de comunicación política son de muy diversa índole, y entre ellos abundan los encuentros con la cúpula militar del país. Tal es el caso del 9º aniversario del Comando Estratégico Operacional. Donde CEPS «sugiere un cierre sencillo, institucional y patriota. Por ejemplo, una alusión al respaldo y agradecimiento sincero del presidente y el pueblo venezolano a estas fuerzas de paz refundadas en revolución para la defensa de los derechos y la soberanía del pueblo venezolano».
Otro ejemplo es la «Juramentación del Estado Mayor para el despliegue del plan Nacional contra el dengue y la chikunguya», en la que CEPS dice: «En el caso de considerarlo oportuno, el presidente (Maduro) podría aprovechar este acto para lanzar alguna propuesta audaz en relación al área de salud».