La ONU “está paralizada” ante conflictos como el de Libia o Ucrania debido a la “anticuada” estructura del Consejo de Seguridad, mientras que los islamistas extremistas se expanden por el mundo frenando desafiando la democracia y los esfuerzos para alcanzar la paz.
Así se expresó hoy la expresidenta de Letonia y actual presidenta del Club de Madrid, Vaira Vike-Feriberga en una entrevista con EFE, en la que consideró que la ONU debería tener un papel más activo en la solución de los conflictos, pero considera que lo impiden los “intereses” de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, como ocurre en el caso de Rusia en relación a Ucrania.
Vike-Feriberga participó hoy una conferencia celebrada en Madrid sobre “El futuro de los vecinos del este y del sur de la UE”, organizada por la el Club de Madrid, el Real Instituto Elcano, la Embajada de Letonia y la Fundación Botin.
El islamismo extremista de organizaciones terroristas como el Estados Islámico viene a complicar la búsqueda de una solución a conflicto como el de Libia, según Vike-Feriberga.
“Lo que realmente es peligroso son los islamistas extremistas que se están extendiendo, reclutando gente en Europa, Norteamérica, Normandía, Suecia, Inglaterra”, dijo al señalar que se trata de “gente que busca una causa a la que dedicar su vida”.
Quizás el mundo occidental “no les esta dando suficientes causas porque hemos desmontado todo, la religión, los valores burgueses (…) y los extremistas están construyendo algo”, añadió.
“Claramente el Consejo de Seguridad y sus miembros permanentes (EEUU, Rusia, China, Francia, Reino Unido e Italia) están en un punto muerto, son impotentes. El resto de la ONU es impotente”, declaró Vike-Feriberga, una mujer enérgica.
En cuanto a la UE reconoció que “lo que ocurre en el Mediterráneo, no solo es del interés de España, Italia, Grecia o Malta o Chipre (….) sino que preocupa a todos”, al referirse a los miles de libios que intentan huir del conflicto de su país en embarcaciones precarias.
“No podemos vivir en paz con gente ahogándose en el Mediterráneo o las oleadas de refugiados en Italia que luego van a Suecia”, dijo.
En Libia como en Haití las partes en conflicto “se niegan a hablarse”, señaló la expresidenta de Letonia.
Sobre el conflicto entre Ucrania y Rusia por la soberanía de la península de Crimea, comentó que si se tuvieran que volver a diseñar las fronteras europeas por reivindicaciones históricas sería un “caos” que “no podemos aceptar”.
“Todo el mundo dice que no podemos tener una guerra” en Europa, señaló al resaltar que “no creo que Rusia cambie de opinión voluntariamente, pero si las sanciones lo conseguirán, no lo se”.
La postura de Rusia de “negar la realidad hace que cualquier tipo de dialogo sea inútil”, dijo Vike-Feriberga, quien elogió los “esfuerzos” de la canciller alemana, Angela Merkel, para buscar una solución al conflicto.
“Hace dos meses, Merkel había llamado por teléfono al presidente ruso, Vladimir Putin, 35 veces, seguro que ahora lo habrá hecho 50 veces (…) no se puede acusar a esta mujer de no hacer esfuerzos”, dijo al señalar que el presidente francés, François Hollande “también intenta hacer lo mejor que puede”.
Finalmente, destacó el papel de instituciones como el Club de Madrid para preservar los valores democráticos en un mundo cambiante, para lo que hace falta “ingenio y creatividad” y para buscar nuevas respuestas.
EFE