El hombre que el viernes decapitó a una persona y atentó contra una planta de gas en Francia tenía un “móvil terrorista” y estaba vinculado al grupo Estado Islámico (EI), afirmó el martes el fiscal de París.
La investigación “deja entrever un móvil terrorista en el gesto de Yassin Salhi, aunque justificado por consideraciones personales”, dijo el fiscal François Molins en una rueda de prensa. También señaló que Salhi, detenido inmediatamente después del atentado, había enviado fotos de la decapitación a un francés presente en Siria, pidiéndole que el EI las difundiera.
AFP