El Parlamento de China aprobó una ley sobre seguridad nacional con la que se endurecerán más los controles en Internet y se da poder al gobierno para que tome “todas las medidas necesarias” a fin de proteger la soberanía.
La tecnología de Internet y de la información tiene que ser “segura y controlable”, se subraya en el documento aprobado por el Comité Permanente del Congreso del Pueblo.
La ley, que se justificó con “crecientes desafíos de seguridad”, desató fuertes críticas y preocupación. “Limita aún más la libertad de expresión”, aseguró el comentarista Zhang Lifan en Pekín. “Se utiliza como excusa la seguridad del Estado”, agregó. Pero la ley revela la propia inseguridad del régimen, apunta.
Las empresas extranjeras temen que su software no pueda trabajar como es debido. La Cámara de Comercio Europea, por su parte, expresó su preocupación por las “definiciones demasiado amplias y vagas de lo que se entiende por seguridad nacional”.
Las compañías temen por el futuro de sus negocios en China en el sector de la tecnología o el software debido a que la legislación deja abierta una puerta al espionaje de datos.
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