El presidente colombiano Juan Manuel Santos convocó el viernes a un consejo de seguridad tras la explosión de dos bombas de baja intensidad en Bogotá que dejaron 10 heridos.
Santos regresó anticipadamente de Perú, donde participaba de la Cumbre Alianza del Pacífico, y llamó a los comandantes de las Fuerzas Armadas y de la policía a la sede de gobierno, explicó la oficina de prensa de la presidencia.
“Quienes acuden al terrorismo demuestran debilidad y cobardía. Creen que nos doblegan. ¡Al contrario, nos endurecen!”, aseguró el mandatario horas antes en Twitter.
Terminada la primera parte del consejo de seguridad, el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Humberto Guatibonza, pidió a la comunidad paciencia para dar con los autores de los dos atentados.
Guatibonza recordó a la prensa que los responsables de una serie de ataques con explosivos en Bogotá en febrero y marzo fueron capturados y “no va a ser diferente esta vez”.
“Tenemos varias hipótesis y a todas les damos el mismo valor”, sostuvo el oficial.
Antes, la alcaldesa encargada de Bogotá, Martha Lucía Zamora, había dicho a la emisora local RCN que se están revisando las cámaras de seguridad de los lugares donde fueron activados los explosivos. “Lo más importante es mantener la calma y esperar los resultados de las investigaciones” que llevan adelante la policía judicial y la Fiscalía.
En tanto, el ministro de Defensa Luis Carlos Villegas anunció una recompensa de hasta 100 millones de pesos (38.111 dólares) para quienes entreguen información que permita ubicar a los responsables de los dos ataques.
La primera explosión se registró sobre por la tarde en la principal zona bancaria de Bogotá. Poco después estalló otro artefacto en Puente Aranda, en el occidente bogotano. En al menos uno de los casos se estableció que un desconocido llamó a la policía para alertar sobre la bomba.
De los 10 heridos, nueve ya fueron dados de alta y uno está en una clínica en cuidados intensivos porque “sufrió un deterioro de su estado neurológico… Permanece entubado y con apoyo respiratorio”, dijo en rueda de prensa Mauricio Bustamante, secretario de Salud de la capital.
El coronel Rafael Vanegas, comandante operativo de la Policía Metropolitana, dijo a la prensa que “estamos en alerta máxima” y que se ha reforzado la seguridad especialmente en el servicio masivo de transporte llamado Transmilenio.
Las explosiones despertaron intranquilidad entre los bogotanos.
Para Luis Manzano, un contador de 49 años, “los atentados de ayer (jueves) son producto de las negociaciones de paz que se están realizando en Cuba con las FARC; es la presión que ejerce ese grupo guerrillero”.
Desde fines de 2012, el gobierno de Santos y las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia adelantan en La Habana un proceso de negociación para tratar de poner fin a más de 50 años de conflicto armado interno.
Olga Osorio, una empleada doméstica de 56 años, dijo que si bien no tenía miedo “hay que estar alerta… No podemos dejarnos amedrentar por los violentos porque somos más los que queremos vivir en armonía”. AP