Los refugiados sirios superan los cuatro millones, anunció este jueves el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en un comunicado, reseña AFP.
El número de refugiados de dicho conflicto, que arrancó en 2011, aumentó un millón a lo largo de los últimos diez meses, precisa ACNUR.
“Es la mayor población de refugiados por un solo conflicto en una generación”, aseguró el alto comisionado, Antonio Guterres.
“Es una población que necesita apoyo del mundo, vive en condiciones de extrema precariedad y se hunde cada vez más en la pobreza”, afirma Guterres.
El número de refugiados se eleva a 4.013.000 personas, según las últimas cifras facilitadas por Turquía, que acoge a casi la mitad (1,8 millones). En general la inmensa mayoría se encuentra en los países vecinos de Siria.
ACNUR cuenta que habrá 4,27 millones de refugiados antes de finales de año. Además hay unos 7,6 millones de desplazados en el interior de Siria.
Actualmente hay 1.805.255 sirios registrados en Turquía, 249.726 en Irak, 629.128 en Jordania, 132.375 en Egipto, 1.172.753 en Líbano y 24.055 en el norte de África. Los alrededor de 270.000 sirios que solicitaron asilo en Europa no están incluidos en estas cifras, ni los miles que se instalaron en diversos países sin registrarse.
“El deterioro de las condiciones empuja cada día a más refugiados hacia Europa y más lejos pero la inmensa mayoría continúa en la región”, añade ACNUR.
El Alto Comisionado estima que hacen falta 5.000 millones de dólares para ayuda humanitaria este año, incluida la que necesitan los países de acogida.
En junio sólo se había recaudado el 24% de esta suma, lamenta la organización de la ONU. Esto significa “interrupciones en la ayuda alimentaria y dificultades para suministrar servicios como la escolarización de los niños”, señala ACNUR.
Añade que en Jordania el 86% de los refugiados que no están en los campamentos sobreviven con menos de 3,2 dólares por día, y en Líbano el 55% de ellos residen en refugios precarios.
ACNUR también denuncia el aumento del trabajo infantil, la mendicidad y los matrimonios forzados de niños, consecuencias todas ellas de esta pobreza creciente.
Los refugiados sirios constituyen casi la mitad de los aproximadamente 137.000 inmigrantes llegados a Europa en los seis primeros meses, cruzando el Mediterráneo en embarcaciones utilizadas por traficantes.