El Gobierno de Guyana aseguró hoy no estar interesado en continuar el proceso de buenos oficios de la ONU porque, según su canciller, Venezuela lo ha utilizado para mantener la disputa territorial sobre la región de Esequibo sin resolver. EFE
“Hemos indicado muy claramente al secretario general de la ONU que el proceso de buenos oficios, que hemos seguido fielmente, no parece ofrecer ninguna solución para seguir adelante”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores guyanés, Carl Greenidge, en una conferencia de prensa transmitida por internet.
El ministro se negó a decir si el país va a aprobar la asignación de un nuevo mediador, que debe realizarse en consenso entre ambas partes, ya que considera que Venezuela ha manipulado el proceso.
“El sentimiento es que este proceso ha evolucionado para pasar a ser una fachada, no deliberadamente por parte de la ONU, en la cual la soberanía de Guyana ha sido amenazada”, dijo.
La reacción de Greenidge surge días después de que Venezuela pidiera oficialmente a Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, que asignara un nuevo mediador para resolver la disputa territorial.
Greenidge defendió que la controversia fronteriza debe resolverse judicialmente en la Corte Internacional de Justicia, porque “es la única opción”.
Destacó que durante las pasadas décadas el proceso de conciliación apoyado por la ONU no ha ayudado a resolver la disputa y señaló que Venezuela ha tomado la oportunidad de violar la integridad territorial de Guyana.
La disputa fronteriza entre Venezuela y Guyana por las aguas de la costa de Esequibo, donde en mayo Exxon Mobil descubrió un yacimiento petrolífero, tiene más de un siglo de antigüedad sobre este territorio de 160.000 kilómetros cuadrados, muy rico en recursos naturales.
El litigio se remonta a la época en que Guyana era colonia británica y está bajo mediación constante por Naciones Unidas desde la firma del Acuerdo de Ginebra en 1966 por ambos Estados.