El Gobierno del presidente Barack Obama envió el domingo al Congreso el acuerdo nuclear con Irán, mientras que el primer ministro de Israel llamó a los legisladores estadounidenses a rechazar el pacto que, dijo, sólo alimentaría a una “máquina del terror iraní”.Reuters
En una primera señal concreta de la determinación europea para reconstruir rápidamente sus vínculos económicos y políticos con Irán tras la disputa de 12 años, el ministro de Economía de Alemania, Sigmar Gabriel, llegó a Teherán junto a una delegación económica y se prevé que otras potencias europeas hagan lo propio.
Obama prometió que ejercerá su veto si el Congreso rechaza el acuerdo, que limita al programa nuclear de Teherán al tiempo que permite un alivio a sanciones económicas contra la República Islámica.
La anulación del veto de Obama requeriría de una mayoría de dos tercios tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado, de modo que el Gobierno cuenta con ganar el favor de suficientes demócratas para contrarrestar a la fuerte oposición republicana.
“Creo que lo correcto es simplemente no aprobar el acuerdo”, declaró Netanyahu en el programa “Face de Nation” de CBS.
“Hay muchas cosas por hacer para detener la agresión de Irán y este acuerdo no es una de ellas”, agregó, mientras continuaba con una serie de entrevistas en medios estadounidenses para denunciar el pacto alcanzado el martes entre Irán y seis potencias mundiales.