Nuestra querida Caracas está cumpliendo 448 años, con su infraestructura vuelta pedazos. Los caraqueños ante el modelaje negativo lejos de reaccionar en defensa de nuestra urbe, nos transformamos en abusadores irascibles.
El sureste luce abandonado. Denunciamos el exabrupto que representa en los hechos la continuación de la Autopista Regional del Centro por la entrada o desvío hacia Hoyo de la Puerta, Monte Elena, El Placer, Los Guayabitos, Oripoto, Baruta, La Trinidad. Por esa angosta vialidad interna municipal de 60 años, circula por los mismos dos canales de siempre, uno bajando y otro subiendo, el transporte pesado repleto de mercancías. En lugar de continuar su tránsito por la bajada de tazón se desvían por esa especie de “bajadita de tazón”, y las autoridades nacionales con competencia en la materia consienten la anomalía.
Por la carretera Baruta- Hoyo de la Puerta, ruedan increíblemente 15 mil vehículos diariamente, lo cual afecta la llegada y salida de los vecinos, y de los estudiantes, trabajadores y profesores de la Universidad Simón Bolívar.
El gobierno cerró el peaje cercano a Tazón, en lugar de utilizarlo para el necesario control de carga. Acabó por decreto con los horarios restringidos del paso de camiones. Urge restablecer un horario para la carga pesada. En estos 16 años de altos ingresos petroleros el gobierno ha podido dejarle a la capital, las circunvalaciones o anillos perimetrales, que evitaría que esa carga pesada atraviese la ciudad por las vías residenciales.
Se construyeron edificaciones en la Limonera sobre tierras movedizas, y autorizaron dos concreteras que contaminan. La Limonera suma a la vialidad raquítica dos mil usuarios adicionales, más los llamados “trompos” pesados que circulan y contaminan a toda hora.
La redoma de Hoyo de la Puerta no fue diseñada para ser la entrada alterna a Caracas desde la Regional del Centro. La angosta vialidad es fatigada por un incesante y ensordecedor tráfico de camiones sin control de tonelaje, sin vigilancia y con impunidad total. Hace falta una barrera en la redoma de Hoyo de la Puerta, que impida el paso de los enormes camiones con contenedores.
Por su parte, la Alcaldía de Baruta no puede quedarse inerte ante la impunidad vehicular que circula por la vialidad municipal, debe decretar ya un régimen especial al respecto. Y además cumplir con retirar rápidamente con sus grúas los vehículos que a cada rato se accidentan y sustraen tiempo productivo a los ciudadanos.
Le solicitamos al ministro de Transporte El Troudi tomar acciones para que su despacho proceda a construir desde Hoyo de la Puerta hasta La Trinidad los distribuidores proyectados que aliviarían esa fatigada vialidad.
¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!
@JulioCArreaza