La tragedia parecía haberse cernido de nuevo sobre el Parque Natural Hawange, donde hace un mes fue sacado con engaños y después abatido a tiros Cecil, el león más famoso y querido de Zimbabue. Otro cazador furtivo había matado a su hermano, Jericó, guardian de los cachorros huérfanos.
Sin embargo, cuando la noticia ya había corrido como la pólvora por las redes sociales, Brent Stapelkamp, investigador del proyecto «Lion Research Project», del Parque Natural Hwange, donde vive Jericó, desmentía categóricamente la noticia.
Stapelkamp, que como hizo durante nueve años con Cecil está monitoreando a su hermano a través de una etiqueta provista de GPS, ha dicho a Reuters que «por lo que yo puedo decir, está vivo y bien».
Las autoridades medioambientales de Zimbabue informaron este sábado de que Jericó, el hermano del león Cecil, muerto de un disparo por un dentista estadounidense en un acto que ha causado consternación en las redes sociales, ha sido también abatido porcazadores ilegales mientras protegía a los cachorros de su allegado.
«Con gran tristeza y lamento, informamos de que Jericó falleció a las 16.00 de esta tarde», ha hecho saber el presidente de la Fuerza de Intervención para la Preservación de Zimbabue, Johnny Rodrigues, según un comunicado recogido por el «Daily Mail».
Tras la muerte de Cecil a manos del dentista Walter Palmer, los expertos se mostraban preocupados ante la posibilidad de que Jericó no pudiera proteger solo su territorio. Según Rodrigues, Jericó se había convertido en la última línea de defensa para proteger a los cachorros.