El líder opositor venezolano y dos veces candidato presidencial Henrique Capriles aseguró este domingo que en el primer semestre del año hubo 56 saqueos y advirtió que estos constituyen “señal de la bomba sobre la que está sentada el país”.
“No se puede jugar con la paciencia de la gente. Los saqueos, que en los primeros seis meses sumaron 56, y 76 más que quedaron en intentos, según indican quienes llevan el registro de estos eventos, son una señal de la bomba sobre la que está sentada el país”, escribió el líder opositor en su columna dominical de prensa.
Bajo el título “¡Cuidado con saltos al vacío!”, Capriles remarcó que “Venezuela se está acercando a una situación insostenible” y que ante eso el Gobierno del presidente Nicolás Maduro “insiste en tensar la cuerda, en jugar con pólvora” con una supuesta inacción.
“¡No se puede ser tan irresponsable! Un Gobierno que mínimamente pretenda dar la imagen de que realmente lo es, no puede ser tan demencial”, remarcó.
El Gobierno solo ha informado de un solitario saqueo, el pasado 31 de julio en la ciudad de San Félix, en el estado Bolívar (sureste), lo que costó la vida a un joven de 21 años, tiroteado por desconocidos, y denunció que se trató de un hecho “planificado” para crear zozobra política.
El presidente venezolano atribuyó los hechos a “planes conspirativos” supuestamente “planificados” en Estados Unidos y ejecutados por “la derecha maltrecha” a la que acusa de querer dar al traste con su gestión presidencial.
Maduro añadió en el transcurso de la semana que “a través de la inteligencia popular” los organismos de seguridad del Estado están actuando para evitar “que esta derecha llene el país de violencia”, porque los saqueos, insistió, “se han planificado en otros estados” en el marco de una “guerra económica” en contra de su gestión.
Esta “guerra económica”, en su criterio, se expresa, entre otros hechos, en el desabastecimiento de diversos productos de consumo masivo, que luego aparecen a precios elevados en mercados informales, lo que ha generado una inflación que la oposición sitúa en más del 100 % interanual en tanto que el Gobierno ha optado por no revelar cifras.
El gobernador de Bolívar, Francisco Rangel, quien el mismo día del saqueo de un supermercado y dos comercios menores en San Félix denunció que los hechos fueron “armados e inducidos”, reiteró la misma versión en una entrevista con el canal Televen y precisó que por ello siguen presas 92 personas.
No obstante, admitió el gobernador afín a Maduro, “no hay dudas de que hay malestar” en todo el país y “no hay dudas de que la gente está haciendo cola para comprar los alimentos y no hay dudas de que estamos pasando por un proceso difícil”.
“Hay que admitirlo para poder enfrentarlo, entendiendo”, añadió Rangel, que en las arcas fiscales entraba un caudal de divisas por la exportación de petróleo que se ha reducido por la caída de los precios del crudo, lo que ha generado “una crisis que por otra parte es muy buena” para diversificar las exportaciones.
Capriles, colega de Rangel en el céntrico estado de Miranda, añadió en su texto dominical que “este gobiernito cree que es suficiente con esconder las colas de la gente que busca algún alimento para que no se note la escasez”.
También, añadió, “cree que si no se publican las cifras oficiales del Banco Central y del Instituto Nacional de Estadísticas pues no existe inflación, y supone que la gente es bolsa (tonta) y se come el cuento de que detrás de la escasez y el desabastecimiento está la guerra económica financiada por el imperio” estadounidense.
“La tensión que se siente en la calle, en cualquier ciudad o en el pueblito más alejado del territorio nacional, no tiene ninguna organización o promoción política por detrás”, aseveró.
“¿Qué pretende? ¿A qué está jugado el Gobierno al no hacer nada para atajar la crisis económica que amenaza con explotarle en la cara a los venezolanos y hundirnos en la crisis humanitaria que ya se asoma?”, remató el gobernador y excandidato presidencial. EFE