El Barcelona llegó hoy a Tiflis en busca de su quinta Supercopa de Europa con la baja de última hora del brasileño Neymar, aunque con el argentino Leo Messi, el futbolista más esperado por los aficionados georgianos.
El Airbus con la plantilla blaugrana aterrizó en el aeropuerto internacional de la capital georgiana unas pocas horas antes del entrenamiento vespertino que celebrará en el estadio del Dinamo Tiflis, escenario del partido.
Los catalanes, que se encuentran a una victoria de igualar al Milán en el historial de la Supercopa, se hospedarán en el exclusivo hotel Marriott.
Además de los jugadores, del equipo técnico y de la directiva, en el avión con destino a la capital georgiana viajaban una veintena de aficionados.
Unas inoportunas paperas han dejado fuera de la convocatoria a Neymar, que tampoco podrá disputar la Supercopa de España, baja que se suma a la del internacional Jordi Alba, que se lesionó en el Gamper ante la Roma.
De esta forma, Pedro será probablemente titular junto a la dupla formada por el astro argentino y el uruguayo Luis Suárez, cuando parecía que su fichaje por el Manchester United de Van Gaal era inminente.
Por lo demás, el técnico barcelonista, Luis Enrique, no tiene muchas dudas, ya que el resto de futbolistas titulares se encuentran en perfectas condiciones, incluido Andrés Iniesta, que disputará su partido número 550 como azulgrana.
En condiciones normales, el internacional español superará esta temporada a otro mito del barcelonista, Pujol, que suma 593 partidos con la camiseta blaugrana.
También viajaron con el equipo, el turco Arda Turan y el español Aleix Vidal, flamantes fichajes del verano, aunque ninguno de ellos podrá jugar hasta diciembre debido a la sanción de la UEFA.
El Sevilla, que disputó el sábado en Atenas un último partido de preparación ante el AEK (1-1), llegó anoche a la capital georgiana.
El partido ha despertado una gran expectación en Tiflis, donde aún se pueden encontrar entradas en la reventa, pese a que las autoridades locales han declarado la guerra a esa práctica y su precio ha ido en aumento según se acerca el partido. EFE