Las autoridades españolas hallaron a tres jóvenes subsaharianos “completamente contorsionados” y sin apenas aire para respirar, ocultos en dobles fondos de un vehículo que cruzaba la frontera entre Marruecos y el enclave norafricano de Melilla, informaron este viernes. AFP
“La Guardia Civil rescata a tres inmigrantes en una situación límite en Melilla”, informó el ministerio del Interior en un comunicado, precisando que la intervención tuvo lugar en la madrugada del miércoles en el puesto aduanero de Beni-Enzar.
“Las personas auxiliadas son tres varones subsaharianos que dicen proceder dos de Guinea Conakry y uno de Costa de Marfil, con edades comprendidas entre los 18 y los 25 años”, agregó.
Fueron hallados ocultos en un automóvil “con placas de matrícula española que en esos momentos accedía a la ciudad procedente de Marruecos”, precisó.
“En el lugar habilitado para la rueda de repuesto (…) estaba alojada una persona completamente contorsionada” cuya situación “era muy crítica, no pudiendo apenas respirar ni tan siquiera ponerse en pie”, explicaron las autoridades.
Las otras dos fueron descubiertas en un segundo doble fondo situado en la parte trasera del vehículo, sometidos a falta de aire, altas temperaturas y “posible contaminación por gases procedentes de la combustión”.
Todos fueron auxiliados en el lugar antes de ser hospitalizados.
Sometidos a una fuerte presión migratoria, los enclaves españoles de Ceuta y Melilla, únicas fronteras terrestres de África con la Unión Europea, ven con regularidad a inmigrantes intentado cruzar ocultos en los lugares más inverosímiles y peligrosos.
Un niño marfileño de ocho años fue descubierto en mayo oculto en el reducido espacio de una maleta en un paso fronterizo de Ceuta.
Pocos días antes, un marroquí de 23 años había permanecido cuatro días encerrado, sin comida ni bebida, dentro de un contenedor marítimo en el puerto de Melilla con destino al continente.