El contrabando de alimentos, medicinas y otros productos regulados o subsidiados es visto por la mayoría de los venezolanos como un delito similar al narcotráfico, el secuestro o el robo de vehículos. Así lo reveló un estudio de percepción elaborado las organizaciones Paz Activa y Observatorio Venezolano de Violencia, el cual arrojó que 51,7% considera que la actividad conocida como “bachaqueo” es un crimen de delincuencia organizada.
“La gente no ve al “bachaqueo” como algo individualizado, de unas personas que buscan sobrevivir, sino como parte de un organización criminal”, apuntó el sociólogo Roberto Briceño León al presentar ayer, en el Hotel Pestana de Caracas, los resultados de la investigación, para la cual fueron consultadas 3.500 personas de siete regiones del país.
El estudio también arrojó luces sobre las responsabilidades de esta situación. Para 66,8% de los entrevistados las autoridades, por su política económica, son las culpables.
Al indagar sobre cuáles políticas habrían sido las que provocaron el problema, 76% señaló al control de precios y 79% lo achacó al empobrecimiento, el que personas dejen sus trabajos para dedicarse a actividades ilícitas.