El gobernador de Miranda, Henrique Capriles, insistió en que el país se encuentra en una situación de emergencia económica y que se deben tomar acciones inmediatas, por lo que una de sus propuestas es el cobro de la deuda que mantienen otros países con Venezuela por concepto petrolero.
Prensa Miranda/Alexander Gudiño
“Venezuela está en una crisis gravísima. Estamos en una situación de emergencia económica y no se puede seguir regalando nuestros recursos. El gobierno debería cobrar esa deuda petrolera mil millonaria para resolver la crisis. Si ellos mandan petróleo a otros países, tienen que cobrar, no puede regalar nuestro petróleo a cambio de apoyo político”.
Capriles sostuvo que la inflación está golpeando a todos los venezolanos y por eso hay que tomar medidas inmediatas. “Todos los días suben los precios de los bienes, la comida y las medicinas. La Canasta Alimentaria está por encima de los 50 mil bolívares. ¿Cómo hace un trabajador que gana sueldo mínimo para vivir? ¿Cómo hace un abuelo para sobrevivir si la pensión no le alcanza? Nosotros pedimos un ajuste general de sueldos y salarios de por lo menos 50%, para que nuestros trabajadores puedan hacer frente a una inflación que solo en el mes de septiembre cerró en 18%, mientras que la anualizada está en 142%. Esta es la inflación más alta del mundo y es consecuencia de un modelo económico que no funciona”.
El Mandatario regional planteó además que los ingresos petroleros de la nación deberían invertirse para reactivar la producción nacional. “En Venezuela tenemos todo para producir, lo que hace falta es un gobierno que apoye a los productores. El dinero que se gastan en importación se debería invertir en materia prima para que las empresas empiecen a producir. Esos 5 mil millones de dólares que llegarán al país por crédito Chino ojalá no sean para financiar una campaña política, ojalá lo utilicen para atender los verdaderos problemas del pueblo”.
Capriles sostuvo que quienes están en el gobierno parecieran vivir en otro planeta y que frente a eso el pueblo debe alzar su voz. “Escuchar a Nicolás Maduro hablar de su paseo por Nueva York es una burla para los venezolanos. ¿Por qué no sale a caminar por las calles de Venezuela? El gobierno no puede seguir con esa indiferencia indignante frente a la grave crisis social y económica que enfrentan los venezolanos”.