Es una de las actrices más bellas de Hollywood. Pero la australiana tiene un obsesión: las cirugías plásticas. Lástima, porque fueron esas operaciones faciales lo que provocaron cambios radicales en su rostro y sus expresiones parecen haber quedado en el olvido, publica Infobae.
La noche del viernes 9 de octubre, Kidman fue invitada a “The Graham Norton Show” y provocó una ola de críticas en las redes sociales respecto a su “inmovilizada” y “congelada” cara. Lejos de interactuar con los tópicos que se trataban en el popular programa, los millones de televidentes volcaron sus comentarios en la falta de expresividad que habían provocado los “retoques” en Kidman.
Junto a Meryl Streep y Carey Mulligan, la australiana de 47 años admitió en el pasado que se colocó bótox en su rostro para lucir más joven. Pero nada le consultaron respecto a un nuevo paso por el quirófano.
“Amo la cara de Nicole Kidman, pero en realidad está congelada”, señaló la usuaria de Twitter Natassia. Otro, señaló: “La cara de Nicole Kidman tiene todo el movimiento que puede tener un glaciar”.
En 2013, durante una entrevista, Kidman negó haberse sometido a algún tipo de cirugía. En aquella oportunidad admitió el uso de bótox, pero señaló que el resultado no había sido el esperado y que ya podía mover su cara con naturalidad. Sin embargo, ahora parece haber ocurrido lo contrario. ¿Se habrá hecho colocar una nueva dosis?