Estados Unidos condenó hoy los “ataques terroristas” en los que tres israelíes murieron y 22 resultaron heridos e instó a todas las partes a dar pasos para “restaurar la calma y prevenir acciones” que aumenten las tensiones.EFE
“Estados Unidos condena en los términos más rotundos posibles los ataques terroristas de hoy contra civiles israelíes, que resultaron en el asesinato de tres israelíes y dejaron heridos a muchos otros”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, en un comunicado.
Tres israelíes murieron y 22 resultaron heridos en cuatro ataques registrados hoy, tres casi de manera simultánea en Jerusalén y la ciudad israelí de Raanana, que acabaron con dos agresores palestinos muertos por disparos de las fuerzas de seguridad.
“Lamentamos cualquier pérdida de vidas inocentes, sean israelíes o palestinas. Seguimos subrayando la importancia de condenar la violencia y combatir la incitación”, indicó Kirby.
“Seguimos profundamente preocupados por las tensiones en aumento y urgimos a todas las partes a dar pasos afirmativos para restaurar la calma y prevenir acciones que puedan escalar aún más las tensiones”, añadió el portavoz.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró hoy que Israel “ajustará cuentas con los asesinos” y empleará “todos los medios para devolver la calma a los ciudadanos” de Israel.
Los ataques y disturbios de los últimos trece días se han cobrado la vida de siete israelíes y 29 palestinos, una decena de estos supuestos autores de ataques y el resto en disturbios y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad en Jerusalén Este, Cisjordania y Gaza.
En el epicentro de esa escalada está la Explanada de las Mezquitas o Monte del Templo, lugar en el que según los acuerdos de 1967 no se permite el rezo ajeno al musulmán.
Recientemente, nacionalistas judíos han visitado el lugar, en condición de turistas, para reivindicar su derecho a rezar en él y, según los palestinos, para rezar en silencio.
El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, conversó este sábado por separado con Netanyahu y con el líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, para instarles a reducir tensiones ante la ola de violencia.