El exgobernador de Zulia, Manuel Rosales, arribó el pasado jueves a Venezuela tras permanecer exiliado en Perú durante seis años. Su llegada “sigue fortaleciendo la unidad de la oposición porque todo venezolano que quiera regresar a luchar por su país y por la victoria del 6 de diciembre es bienvenido”, afirmó el concejal de Chacao, Diego Sharifker, quien acompañó al dirigente en su llegada al país.
Nota de prensa
Para el concejal, “en 2006 a Rosales le tocó asumir una gran responsabilidad con el país” y considera que ahora “empieza una nueva etapa donde se están llamando a todos los exiliados a volver porque Venezuela se puso chiquita y todo el que quiera colaborar, es bien recibido”, acotó.
Sin embargo, el analista político José Rafael Mendoza difiere de Sharifker y estima que el regreso de Rosales demuestra debilidad en el liderazgo político de la oposición. “Su llegada es para tratar de catapultar esa imagen vacía que existe en la tolda opositora”, quien agregó que no cree “que pase nada” tras la vuelta al país del exalcalde de Maracaibo.
Mendoza enfatizó que la oposición tiene que recomponer la estructura de los liderazgos, unificar criterios y trazarse un plan a largo plazo porque “ahora no lo tienen”. A su juicio “solo quieren la salida del Gobierno porque quieren la salida”, estimó.