El Gobierno de Guyana respondió este jueves a las reclamaciones de la Embajada de Caracas en Ottawa por la supuesta violación de la integridad territorial de Venezuela en la región de Esequibo, que denunció en una carta enviada a la empresa canadiense que opera una mina oro en el área en disputa.
EFE
El presidente de Guyana, David Granger, señaló durante un discurso dirigido hoy al Parlamento que la Embajada de Venezuela en Ottawa realizó la reclamación el pasado 13 de octubre a través de una carta enviada a la compañía canadiense Guyana Goldfields que opera la mina Aurora desde el pasado septiembre.
Granger detalló que la carta leía que “violar la soberanía territorial de Venezuela y cometer acciones ilegales podría incurrir en consecuencias”.
“La carta de la Embajada de Venezuela en Ottawa refleja la postura tomada por el expresidente Hugo Chávez durante su visita de Estado a Guyana en febrero de 2004”, dijo el mandatario guyanés en el discurso que fue reproducido por el periódico local Starbroek News.
Granger subrayó que la “doctrina de Chávez estipulaba que Venezuela tenía derecho de decidir el futuro desarrollo en la región guyanesa del Esequibo”.
Dijo además que Venezuela ha mantenido el objetivo de “obstruir el desarrollo de Guyana a pesar de los diálogos bilaterales”.
“El miedo de Venezuela es que, una vez se pruebe que no es nulo el acuerdo arbitrario de 1899, su estrategia de los pasados 50 años de recuperar el territorio de Guyana pueda estar al borde del colapso”, dijo Granger.
Las expresiones de Granger llegan semanas después de haber acordado con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, una solución a la disputa territorial que mantienen sobre la región del Esequibo y que está actualmente bajo la mediación de la ONU.
Durante su discurso, el presidente guyanés también habló brevemente sobre las reclamaciones de soberanía de Surinam sobre la región de New River, al sureste de Guyana.
“Guyana no tiene duda de la falta de fundamentos para realizar este reclamo sobre ese territorio. No tenemos miedo en atender cualquier reclamo de Surinam”, señaló Granger.
Defendió para concluir que su país “continuará trabajando con la República de Venezuela y la República de Surinam para hacer de nuestra región una pacífica”.