El jefe de Gabinete del Gobierno saliente de Cristina Fernández, Aníbal Fernández, y el que será su sucesor en el cargo en bajo el Ejecutivo de Mauricio Macri, Marcos Peña, mantuvieron hoy una reunión “relajada” y “positiva” para trabajar sobre la transición política que vive Argentina. EFE
Aníbal Fernández recibió a Peña en la Casa Rosada, sede de la Presidencia argentina, a primera hora de la mañana de hoy después de varios días de cruces de acusaciones entre el oficialismo y el equipo del líder conservador.
“Definimos seguir conversando sobre distintos temas prácticos respecto al traspaso del poder”, transmitió Peña a los medios a la salida de la reunión, que definió como “cordial” y “positiva” y que duró alrededor de una hora y media.
Peña destacó la importancia de que se pueda “empezar a hacer una transición más relajada, más ordenada”.
“Con Aníbal compartimos la responsabilidad que nos toca en la transición, en el traspaso de mando; creo que simbólicamente en una democracia tenemos que mostrar civilización y cordialidad; aunque no estemos de acuerdo en todos los temas, trataremos de dar los pasos necesarios para que las cosas salgan bien”, explicó.
El pasado martes, dos días después del balotaje que situó a Macri como próximo presidente de Argentina, la actual mandataria, Cristina Fernández, y el líder conservador tuvieron una primera reunión para acordar los detalles del proceso de transición.
“No valió la pena”, manifestó esa misma noche Macri, quien pide que los términos de la transición sean públicos frente a la colaboración “con discreción” que ofrece el oficialismo, en palabras de Aníbal Fernández.
Peña acusó posteriormente al Gobierno saliente de querer realizar una transición clandestina y el jefe de ministros saliente salió al paso desvelando que ya había invitado a su sucesor a conversar pero que el encuentro había sido vetado por Macri.
“Yo lo llamé a Marcos Peña y tuvimos una charla muy bien, pero me dijo que el presidente electo vetó el encuentro si no era a la luz del día. Pareciera que fuera a la luz de las cámaras, no a la luz del día. Yo lo invité a mi público despacho, no a un bar”, defendió el miércoles en una entrevista Aníbal Fernández.
Tras la polémica, que evidenció las dificultades de esta transición exprés, Peña y Fernández mantuvieron hoy su primer encuentro de trabajo, anuncido por Twitter por el jefe de ministros entrante.
“Entrando a la Casa Rosada para reunirme y conversar con Anibal Fernandez”, escribió Peña en la red social, quien a la salida subrayó que no fue una reunión “secreta”.
Macri recibirá el bastón presidencial argentino de manos de Cristina Fernández el próximo 10 de diciembre.