Desde las 6:00 de la mañana de este martes 8 de diciembre fueron reactivados los pasos peatonales autorizados por el Gobierno venezolano por los puentes internacionales Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander, los cuales estaban suspendido temporalmente debido a las elecciones parlamentarias del pasado domingo. Así lo reseña lanacionweb.com / José G. Hernández
Por la avenida Venezuela de San Antonio, que conduce hacia el puente internacional Simón Bolívar, se pudo apreciar nuevamente a viajeros de todas las edades cargando pesados equipajes, niños y niñas llevando bolsos, bicicletas o juguetes que tal vez sean su obsequio de Navidad. Guiados por militares de la Guardia Nacional, los viajeros entran y salen del territorio nacional durante todo el día.
Este martes, igualmente hubo paso para personas por casos médicos, pacientes renales que se dializan en Cúcuta, al igual que para empresarios y trabajadores registrados que laboran en empresas ubicadas a uno y otro lado de la frontera.
También se mantiene abierto el paso escolar, aunque ya el número de estudiantes que cruza los puentes internacionales es bajo, pues ya finalizó el año escolar en las instituciones colombianas. Igualmente pasan la frontera estudiantes universitarios, así como niños que viven en territorio colombiano y estudian en instituciones de San Antonio y Ureña.
Para que las autoridades militares y de migración permitan cruzar la frontera, los viajeros que entran o salen del territorio venezolano deben de presentar el pasaporte sellado; los propietarios de empresas y trabajadores deben estar registrados en un listado que lleva la autoridad única de la Zona 1, mientras que los pacientes o personas que se dirijan a Colombia por consulta, tratamiento o en busca de medicamentos, deben de presentar el salvoconducto otorgado por la respectiva autoridad sanitaria.
La situación se complica para las personas que no entran dentro de estas excepciones concedidas por el Gobierno venezolano desde el pasado 19 de agosto, cuando ordenó el cierre de la frontera. Al no encajar dentro de las autorizaciones permitidas, deben ingeniárselas, suplicar o esperar horas para poder cruzar la raya limítrofe colombo-venezolana.