Bastó que el pueblo chavista le diera la espalda por su paupérrima conducción de la nación, para que Nicolás Maduro ahora anuncie que revisarán los resultados electorales.
El chavismo ahora pone en duda “el mejor sistema electoral del mundo” y la “imparcialidad” del Consejo Nacional Electoral.
Desde el pasado mes de marzo el primer mandatario nacional estuvo dispuesto a “firmar cualquier acuerdo para reconocer desde ya, los resultados de elecciones parlamentarias“.
La palabra de Maduro vale lo mismo que un billete de dos Bolívares Fuerte.
