Maduro se apuntó un plan más a su lista. Esta vez pocos esperan con expectativas los anuncios que se harán dentro del decreto de emergencia económica anunciado por el Presidente de la República. Se trata de una medida que debe ser bien estructurada y que no funcionará en medio de un clima de controles y persecuciones que no genera confianza.
Las prioridades deben estar claras. Generar políticas que permitan a las empresas tener acceso a la materia prima y la reactivación de las mil 200 compañías que fueron expropiadas y nacionalizadas y están actualmente improductivas, deben ser los primeros puntos a resolver con este decreto, resaltó Damiano Del Vescovo, presidente de Fedecámaras Carabobo.
De ser así medidas en 18 meses se lograría mejor presencia de productos en los anaqueles, lo que tendería a la normalidad progresiva del abastecimiento de acuerdo a la demanda nacional. Pero si reina el discurso represivo y de persecución es poco lo que se podrá alcanzar. “Se debe respetar el derecho a la propiedad, el capital y el trabajo, a fin de generar la confianza necesaria que permita estimular las inversiones nacionales y extrajeras”.