Ayer, mientras hacía la mega cola para poder limpiarme la cola pensaba, ¿por qué tenemos que sufrir tales humillaciones? ¿Acaso es justo que pasemos tanto tiempo a la espera del tan ansiado papel
higiénico?
Tal cual manada de mandriles, de tanto limpiarnos con servilletas, también recordaba las palabras de esos “socialistas” quienes anunciaban que iban a acabar con las diferencia de clases. Realmente lo hicieron, agarraron la clase alta, media y baja y las hundieron a todas, nos metieron en un mismo saco con una etiqueta que te recuerda
a diario la mala calidad de vida que tenemos.
Socialistas, que por cierto, sí se distanciaron enormemente del pueblo que creyó en ellos, socialistas que nadan en sus fortunas y usan, por supuesto, el mejor papel, importado. La excelencia de los soft.
Aún no avizoro el comienzo y ni volteo para mirar el final de la cola, solo veo con cara de satisfacción a quienes sí lograron comprar sus rollos para limpiarse la cola. A medida que avanzo, una alegría droga mi mente, y luego, cuando razono, me doy cuenta de semejante estupidez, el gobierno ha hecho que me alegre por conseguir, después
de muchas horas de sol, productos que deberían estar abarrotando los anaqueles. De igual manera sucede en cada comienzo de año, cuando rogamos la asignación del dichoso cupo de internet y viajero, una
medida que no debería existir, que merma nuestra libertad.
Hasta cuando este gobierno nos va a ver la cara de culo, gracias a Dios, no la tenemos porque tampoco tendríamos con qué limpiarla, es necesario colgarse la dignidad en el pecho y luchar por nuestros derechos, nos merecemos calidad de vida y no seguir mendingando a diario.
La lucha no terminó con la victoria de la Unidad en la Asamblea, hay que seguir luchando, acaso no estás cansado de pertenecer a una sociedad de culo rojo???
@niomaroropeza