La soberanía alimentaria está fracturada. No hay quien la garantice. El Ejecutivo no tiene los dólares suficientes para importar y abastecer el mercado interno, y aplicó la política del descuido a la producción agraria nacional. La mayoría de las tierras están improductivas. 400 hectáreas de la zona rural de Los Guayos tienen un año sin cosechar como consecuencia de la falta de maquinarias, sistema de riego e insumos, cuyo monopolio en el suministro lo maneja el Gobierno.
Las caraotas son el fuerte de estos 60 agricultores. Entre las tierras de El Charal, La Unión, Valle Verde y La Ensenada se pueden cosechar hasta 400 mil kilos de este grano cada tres meses, eso se traduce en mil 600 kilos al año “que según nuestros cálculos se pueden vender en 200 bolívares cada uno”, detalló Francis Rodríguez, productora del municipio.
Pero desde hace un año no reciben insumos desde Agropatria. Necesitan semillas, abono, insecticidas y fertilizantes, pero la respuesta siempre es la misma, “para nosotros no hay nada aunque vemos que entra y sale mercancía del lugar”. Para los agricultores afectados, esta situación es sencilla de explicar “nos quieren cercar para que no saquemos nada al mercado y seguir manteniendo los precios altos. La guerra económica la hacen contra nosotros y la sociedad”.