El cofundador y máximo accionista de Facebook, Mark Zuckerberg, ya es el sexto hombre más rico del mundo. La fortuna del empresario neoyorquino de 31 años ha subido, solo este miércoles, en 5.500 millones de dólares (5.030 millones de euros) después de que la compañía que dirige se disparase en Bolsa tras anunciar un beneficio un 25% superior en 2015. La fortuna de Zuckerberg asciende ahora a 47.000 millones de dólares y supera así los 45.300 millones de los hermanos Charles y David Koch, propietarios de Koch Industries, una firma muy afectada por el desplome del crudo. La lista de personas más acaudaladas del mundo sigue liderada por el fundador de Microsoft, Bill Gates; el español Amancio Ortega (Inditex) y Warren Buffett (Berkshire Hathaway).
La red social que permitió a Zuckerberg dar el salto al firmamento de las grandes fortunas mundiales, Facebook, cerró el año pasado con una ganancia neta de 3.690 millones de dólares (unos 3.400 millones de euros), la cuarta parte más que un año antes. En los primeros compases de 2016, la firma se ha convertido en una de las más aplaudidas por los inversores: sube un 8% en menos un mes y rompe la tendencia bajista de la mayor parte de valores de Wall Street.
En 2015, los 1.590 millones de usuarios activos que usan actualmente la red social le generaron una cifra de negocio que asciende a 17.930 millones de dólares. En este caso el incremento de los ingresos fue del 43% mientras que la base de usuarios lo hizo un 14% en el año.
Facebook ha experimentado un gran incremento de sus ingresos por publicidad, gracias a la implantación de nuevos formatos. Es el caso de la publicidad a través de la telefonía móvil, que representa hasta el 80% de los ingresos totales por publicidad del cuarto trimestre.
La gran pregunta que se hacen los inversores es si la plataforma puede mantener el crecimiento meteórico que experimentó hasta ahora. Es la misma cuestión que ronda sobre Apple, tras ver en la víspera como se le estancaron las ventas del iPhone en el trimestre. Facebook está madurando con rapidez y eso se deja sentir en el bolsillo de Zuckerberg.
Vía Bloomberg