El Ayuntamiento de Roma aprobó hoy que las furgonetas de venta ambulante puedan volver a operar en las inmediaciones de la plaza de San Pedro del Vaticano, algo que tenían prohibido desde el pasado diciembre.
El comisario extraordinario Francesco Paolo Tronca, que gestiona el consistorio romano desde la dimisión del anterior alcalde, Ignazio Marino, en noviembre de 2015, aprobó hoy esta ordenanza, que permitirá que retomen su actividad estas camionetas que venden bocadillos, bebidas o recuerdos a los turistas, informaron los medios locales.
En diciembre, el ayuntamiento romano prohibió la presencia de estos camiones y otros puestos turísticos ubicados en los alrededores del Vaticano durante el Jubileo Extraordinario de la Misericordia convocado por el papa Francisco, desde el 8 de diciembre hasta el 20 de noviembre.
Hoy esta decisión fue parcialmente modificada pues podrán volver a establecer su negocio durante algunos días, lunes, martes, jueves y viernes, con excepción de las jornadas en las que haya programado algún evento jubilar.
Las zonas en las que dejará de estar prohibida la presencia de estos camiones serán la Vía de la Conciliación, que une Roma con el Vaticano, las calles cercanas a las columnas de San Pedro, la plaza Pio XII y la Vía dei Corridori.
El pasado julio, el alcalde Marino anunció la “liberación” del centro histórico de estas camionetas de comida rápida en zonas como el Coliseo o los Foros Imperiales.
Marino justificó esta decisión, que enfadó a los vendedores ambulantes, como una medida necesaria por una cuestión de imagen en esta destacada área arqueológica. EFE