El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, publicó este miércoles una fotografía con su esposa durante la ceremonia de inicio de la Cuaresma previa a la Semana Santa, que coincide con el período antes de la anunciada firma de la paz con las FARC.
AFP
“Que este sea el año de la paz. #2016EnPaz”, escribió el mandatario, que el 23 de marzo a más tardar se comprometió a sellar el acuerdo final con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), con las que negocia desde 2012 para poner fin a más de medio siglo de conflicto armado.
El 23 de marzo coincide con el Miércoles Santo, día de la Semana Santa en que finaliza la Cuaresma e inicia la Pascua, fiesta central del cristianismo en la que se conmemora la resurrección de Jesucristo.
En la foto que Santos compartió en la red social Instagram, el mandatario, católico declarado, aparece al lado de su esposa, María Clemencia Rodríguez, en la ceremonia del Miércoles de Ceniza.
En la imagen, que según fuentes oficiales fue tomada en la capilla de la presidencial Casa de Nariño, se ve que tanto al presidente como a la primera dama les fue impuesta la simbólica cruz de cenizas en la frente, un rito de esta celebración litúrgica que abre la Cuaresma.
En estos 40 días de cuenta regresiva hacia la Pascua, los católicos se preparan espiritualmente con ayuno y abstinencia para renovar su fe con penitencia y reflexión.
El 23 de septiembre pasado, Santos y el líder de las FARC, Timoleón Jiménez, “Timochenko”, se comprometieron a firmar un acuerdo definitivo de paz antes de los siguientes seis meses, en un histórico encuentro en La Habana, sede de las negociaciones del gobierno y la guerrilla.
Desde entonces, ambas partes negocian a marcha forzada los últimos temas de una agenda de seis puntos que acordaron en el proceso de paz más avanzado de los cuatro que el Estado ha emprendido con este grupo rebelde desde su alzamiento en armas en 1964.
Las FARC, con unos 7.000 combatientes, según cifras oficiales, es una de las guerrillas involucradas en el conflicto armado colombiano, en el que también han participado paramilitares y fuerzas del Estado y que deja ya unos 220.000 muertos y más de seis millones de desplazados.
En Colombia, el tercer país con el porcentaje más alto de católicos de Latinoamérica (79%), por detrás de México y Paraguay, muchos ciudadanos lucían este miércoles la cruz de ceniza en su frente.