Sea cual sea la situación de las diferentes familias venezolanas, tener entre 18 y 25 años debería ser sinónimo de independencia económica como lo es en países como Austria, Alemania y Nueva Zelanda.
Sin embargo, el contexto económico que vive Venezuela no les permite alcanzar la meta principal: independizarse. Ahorrar no es una opción, así que, en lugar de invertir su dinero para el futuro, lo gastan como la mayoría de los venezolanos mayores de 18 años.
Francisco J. Allen Vázquez, gerente de la Unidad de Análisis Económico de Datanálisis, maneja cifras anuales que recoge la encuestadora sobre la distribución de ingresos y el uso personal que le dan los venezolanos mayores de 18 años a su dinero.
En el sondeo de febrero de 2015 se observa que 48, 3% de los ingresos se invierte en alimentos, 8,7% en cuidado personal y 7,4% en el cuidado de la salud. Los ingresos que son destinados a los ahorros apenas llegan a 2,6%.
La capacidad de ahorro disminuye a 2,3%, lo que quiere decir que la visión de futuro y esa meta de independizarse se vuelve cada vez más lejana.