La reiteración y ampliación por un año por parte del gobierno de los Estados Unidos y su presidente Barack Obama de señalar al gobierno de Venezuela como una amenaza a la seguridad de esa nación obedece al incumplimiento de promesas hechas por funcionarios del régimen, reveló el periodista Nelson Bocaranda.
Las promesas venezolanas, realizadas a Thomas Shannon en Haití por parte de Diosdado Cabello y Delsy Rodríguez y en Washington por Maximiliem Arbelaiz, de disminuir ataques a los opositores, respetar estado de derecho en tribunales y fiscalía y cesar persecuciones y represión violenta por parte de colectivos contra opositores, no fueron cumplidas y activaron por un año más el famoso “decreto Obama”.
Entre las promesas realizadas por el gobierno bolivariano estaban certificar guerra contra narcos militares y civiles con incautación de alijos y avionetas y detenciones verdaderas, no mediáticas y sin seguimiento penal.
“Estados Unidos se sintió engañado por el gobierno de Maduro al ofrecerle éste a través de sus tres enviados oficiales tomar acciones para enmendar tanto los abusos contra opositores como acciones de los narcotraficantes en todo el país”, reveló Bocaranda.
Tras el 6D se pidió respeto para la voluntad electoral y la nueva Asamblea Nacional electa. El representante en Washington, Arbelaiz, aseguró que el propio presidente le habría dicho que esos resultados serían aceptados.
“Sorprendió a la Casa Blanca posteriores acciones emprendidas desde la anterior AN designando ilegalmente magistrados y ésta semana desde el TSJ tratando de desconocer la nueva AN”, finalizó Bocaranda en sus Runrun.es.