Policías brasileños antimotines utilizaron cañones de agua y gas lacrimógeno para dispersar a manifestantes detractores del gobierno desde la central Avenida Paulista de Sao Paulo, informaron medios locales, antes de una protesta planeada para el viernes a favor de la cuestionada presidenta Dilma Rousseff.
Los manifestantes antigubernamentales habían bloqueado la calle principal de Sao Paulo desde el miércoles por la noche, cuando se desataron protestas contra la designación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva como ministro.
Los opositores afirman que esa medida fue ideada para dar inmunidad a Lula frente a fiscales que lo acusan de fraude y lavado de dinero. Reuters