Los locales del obispado de Lyon (este de Francia) fueron objeto de un allanamiento el miércoles por la mañana, en el marco de una investigación por no denuncia de agresiones sexuales contra responsables de la diócesis, entre ellos el cardenal Philippe Barbarin, indicó una fuente cercana al caso. AFP.
Esta investigación se realiza de manera paralela a la inculpación, a fines de enero, del sacerdote Bernard Preynat por agresiones sexuales cometidas hace más de 25 años contra scouts en la periferia de Lyon.
Varias víctimas demandaron a sus responsables religiosos, entre ellos el arzobispo de Lyon, al que acusan de no haber informado a la justicia sobre los actos del sacerdote cuando se enteraron de ellos, en 2007-2008, según sus propias afirmaciones.
“En el marco de la investigación preliminar abierta por la fiscalía de Lyon, la diócesis de Lyon entregó hoy (miércoles) a los investigadores que efectuaron el allanamiento los elementos que la justicia desea tener para aclarar esos acontecimientos dolorosos”, confirmó un comunicado de la diócesis.
El “cardenal Philippe Barbarin expresó numerosas veces su voluntad de cooperar con toda transparencia con la justicia” y “se mantiene a su disposición con confianza”, agregó el comunicado.
Según la fuente cercana al caso, este allanamiento se realizó también en el marco de una segunda investigación preliminar, abierta después que la fiscalía recibió, en febrero, informaciones sobre hechos de pedofilia antiguos por parte de otro sacerdote de la diócesis.
Esas informaciones emanan de una víctima, que actualmente ejerce una alta función en el ministerio del Interior.
En el caso del padre Preynat, el juez de instrucción declaró recientemente que los cuatro casos de agresión retenidos contra él no están prescriptos, por lo que el procedimiento judicial puede continuar.