Hasta 12 horas pasaba Julio César Tribilión, de 62 años, fuera de su casa todos los martes, cuando salía al mercado para abastecerse de productos básicos. La suerte le cambió ayer y una hora después de llegar al Bicentenario de la avenida 5 de Julio de Maracaibo, su corazón colapsó y falleció de un infarto entre los pies de los otros compradores. Nadie lo auxilió, publica La Verdad.
Desde la calle 13 con avenida 39 del barrio Chino Julio, al noroeste de Maracaibo, salió Tribilión sin decirle a sus familiares. Se levantó en la madrugada de ayer, desayunó, se vistió de pantalón, suéter a rayas y zapatos marrones. Agarró su dinero y caminó a las 4.00 de la madrugada hasta la avenida principal del barrio y se montó en el bus El Brillante, se quedó en la avenida Delicias y caminó cinco cuadras hasta un supermercado.
Llegó una hora más tarde, se acomodó entre los presentes y sin poder avisar a nadie se desplomó en la acera. Los testigos trataron de sostenerlo pero murió instantáneamente. Llamaron a la Policía científica para que recogiera el cadáver de la vía pública.
En la noche, Jorge Tribilión, su hermano, contó que este salía al mercado todos los martes que le correspondía comprar por su terminal de cédula. “Iba por lo que consiguiera”, ya que según los presentes, ese es “el único que tiene más productos”. Cada martes llegaba a su vivienda a las 4.00 o 5.00 de la tarde. “Eso depende de qué vendieran”, dijo un vecino.
Trabajó durante su juventud como chofer de una industria en la ciudad, manejaba un camión 350. La familia aseguró que el sexagenario se medicaba para controlarse la tensión y que su hermano mayor murió también por un ataque al corazón.