El reguetonero Nicky Jam confesó ser un músico “natural” que se pierde si tiene que leer música, durante su intervención hoy en la Conferencia Billboard de la Música Latina que se celebra en Miami, Florida (EE.UU.).
EFE
“Me pones a leer música y me pierdo. Es más, tengo tatuado un símbolo en la cara y no sé ni cual es”, bromeó Nicky Jam acerca de la corchea que lleva tatuada encima de su ceja derecha.
Jam, quien participó en una sesión de preguntas y respuestas de la conferencia, manifestó que se pierde si tiene que leer música, a pesar de que compone con una “guitarra” al lado y no con una base de reguetón como hacen “otros artistas”.
Leila Cobo, directora del contenido latino de la revista Billboard, fue la encargada de “sacarle los colores” al reguetonero, quien no dudó en hablar de su vida privada y los “vicios” del pasado que le “llevaron al piso”.
“Llegó un momento en el que me di por vencido, y me dije a mí mismo: ya la música no es para mí”, señaló el cantante, cuyo nombre completo es Nick Rivera Caminero.
Luego, sería en Colombia, en el año 2007, donde el cantante de ascendencia puertorriqueña por su padre y dominicana por su madre, se reencontraría consigo mismo como artista, y siguiendo los consejos de su mentor Daddy Yankee, abandonaría sus vicios y volvería a sentirse “grande”.
Nicky Jam, quien considera que debe hacer “líricas de la talla de artistas como Ricky Martin o Enrique Iglesias”, cuenta en esta vigésimo séptima edición de los Premios Billboard de la Música Latina con 11 nominaciones, igualando al español Enrique Iglesias y una por debajo del bachatero neoyorquino Romeo Santos que parte como favorito con 12 nominaciones
El reguetonero, quien ha logrado estar 30 semanas consecutivas en la lista Hot Latin Song con “El Perdón” junto a Iglesias, considera que prefiere colaborar con artistas como Juan Luis Guerra, Maná o Romeo Santos antes de “brincar” con los americanos.
“Me falta mucho por hacer en el Mundo Latino antes de irme a Gringolandia”, señaló el artista caribeño.
Jam, además de regalar unas estrofas de su nuevo disco -que se estima que salga en septiembre-, bromeó con los asistentes contando anécdotas de sus inicios como músico, en los que él “creía que Daddy Yankee era negro”.
“Yo solo lo escuchaba y pensaba que era negro por la manera que tenía de cantar, y cuando lo vi por primera vez, ¡era blanco!”, exclamó.
“Si él es blanco y puede, yo también puedo”, dijo el reguetonero de su compañero quien, como afirma, tiene el “sabor” de un negro en un cuerpo de blanco.